Mostrando las entradas para la consulta mules ordenadas por relevancia. Ordenar por fecha Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas para la consulta mules ordenadas por relevancia. Ordenar por fecha Mostrar todas las entradas

Trovada y 5 , Historietes 2


Trovada y 5 , Historietes 2

Y p’acaba un poc de mistiari. Tots los pobles, de cualquier puesto, tenen historietes rares, misterioses. Mols camins no se sap si son historietes, coinsidansies, milacres, misteris o invensió de algun vei, que es massa cuentiste com l’agüelo “Sebeta”.  Pos a l’Aldea tamé; n’hay triat tres, segur que ne ñá mes.

Avans de escomensá lo “Sebeta” vol demaná disculpes, per si les coses que va a contá, no van passá aisina, o no van pasá, o se u ha inventat ell.

PRIMERA:

Está la leyenda de la Marededeu, a la que mols veins de l’Aldea li tenen una fe mol gran. Según han vingut contan les persones machós; que, al matéis tems, los u habien contat los seus antepasats; y apareis a les cansonetes que se canten cuan se li fa la novena; o sigue la historia del poble; un home de Bot (Tarragona), va pasá per la ermita, que está separada del poble, un sincsens metros; y va furta la imagen y se la va endú a la seua casa.
Al poc de tindre la Marededeu, a la casa se van escomensá a fica malals tots los de la familia. No ñabie dotó, ni medicina qu’els curare; cada camí se posaen pichó, mes mals. Al remat, lo qui la habie furtat; mich arrepentit y mich en po de que se moriren tots los de la familia; va ana al retó del poble y se va confesá dien lo que habíe fet. Lo mosen enseguida li va dí la penitansia: tenie que torná la Marededeu al matéis puesto de agon la habie furtat.
Com no li quedae atre remei; aisí u va fé. Los veins de l’Aldea que, al notá la desaparisió de la seua Virgen, li habíen estat resán y fenli novenes, pa que tornare; al veurela atre camí al pilá, van pensá que habie pasat un milacre, van tindre molta alifara y van fé una gran festa.
La leyenda no u diu, pero ñaurá que pensá que la familia del lladre se posarie bé, pa que acabo bé la historieta.
Mes tart, la van torná a furtá y va apareise a Torresilla, al trovala posada a un pilá que allí li dieben de la Piedad, se li va quedá eise nom Virgen de la Piedad.
Tamé se comente que cuan la guiarra, un home pa que no la chafaren, la va pillá y la va enterrá, al corral de les mules, davall del fem, y cuan va acabá la guiarra, la va torná al seu puesto.
La chen li te molta devosió y pa demanalí coses, li resen dienli “danos consuelo en la vida, oh, Virgen de la Piedad.” Tos la poso, per si algún nesesite achuda; may se pot sabé, cuán fará falta o quí te pot curá.
SEGUNDA:
Al escomensá la guiarra del 36; com a mols pobles, ya u hay contat a unes atres charrades; a l’Aldea, va ñaure una part del poble que, defenen les seues idees, van tirá per un costat; una atra part, tamé defenen les seues idees, van tirá per l’atre; y uns atres, que no van tirá per cap costat, encara que tenien les seues idees,  van tindre que patí per part de uns y dels atres.
Tal com u hay contat ya; al prinsipí los que van escomensá manán, lo prime que van fé, va se entrá a la iglesia y fe maleses, dintre y de fora; van cremá sans y santes, los vestits del retó y van tirá, chafanles les estatues de pedra que ñabíe a la fachada; a les que no podien arrencá los tallaven los brasos, lo cap, lo que podien.
Presidin eisa fachada, al mich, estabe San Miquial, patro del poble, en lo bras dret eisecat, portan la espada en la que pareisie luchá en lo demoni que tenie davall.
Com estae ben agarrat, va ñaure dos homes que van puchá, y, mentres un aguantae la estatua, latre li va partí lo bras dret.
Pos be, mes tart, al que habie sostés la imagen si li va umplí la cara de nafres; y al atre, al que va partí lo bras; mentres la guiarra, quina casualidad, va piarde lo bras dret, p’el matéis puesto que ell habíe partit lo de la estatua. Segur que va sé una coinsidansia; va ñaure mols que, a la guiarra, van piarde brasos y garres; uns atres van piarde la vida y no habien fet cap de malesa; pero ahí quede la historieta …..
TERSERA:
A mitat del sigle pasat, un home de l’Aldea, estae llauran, y llaurabe fondo, apretan per abais; de momen se li enganche la rella; y pareis que espente algo; que mau algo; pare al animal; llimpie lo tros y li apareis com una tapa de pedra fina, la lleve y oh! Sorpresa. Allí dabais ñabie com un trull de tiarra en forma de tenalla. Y aquí es cuan escomense lo mistiari, l’agüelo com ere tan menut, sol s’enrecorde de aisó, de que van dí que ere d’els tems d’els moros y que ya sen habien trovat mes pel poble. No m’enrecordo de quí la va trova; y may me van dí si va trová algo dintre.
Lo “Sebeta”, lo crio, cuan estae sol, ensomiabe que ne trovae una y que dintre ñabie un tesoro y en eisos dines, llevabe a sa mare de serví, y la teníen sempre a casa en ells. Sol ere que ensomiabe. Non va trova may cap de trull de tiarra en forma de tenalla.
Y se va acabá la trovada; a tots los va agradá tan que van quedá p’al añ que ve, atre camí.
A totes les persones del Consell, grasies per la vostra memoria, pero sobre tot, grasies per la vostra HISTORIA, que, ara ya es la NOSTRA historia. Grasies y seguiu están ahí mols añs. T’os nesesitem, ara més que may.
FIN.
Nota: Después de haber acabat la charrada m’arrivat la historia de la Marededeu y tos la fico tal y com m’arrivat:
“Nª Sª de la Piedad.
En el lugar de Valjunquera.
En el camino real de Valjunquera, Aldea de la Ciudad de Alcañiz  y a distancia de quatrocientos passos de aquel Pueblo, venera la devoción Christiana  la S. Imagen de N.S. de la Piedad en una Hermita muy hermosa, y fabricada a lo moderno: el título de la Piedad, se la dio la de aquellos devotos, que cuidaron de colocarla allí: el origen de esta Milagrosa Imagen, según consta por algunas memorias, fue en la forma siguiente. Por los años de 1575. Vivía en la Ciudad de Valencia Urbano Foz, natural de Valjunquera, y escultor: deseando este regalar a su Abuelo Pedro Foz, con alguna alaja de gusto, embiole esta S. Imagen, fabricada por sus manos: estimola tanto Pedro Foz, que no quiso, teniéndola en su casa, hazerla incomunicable, sino que erigiendo cerca del Lugar un pilar, la colocó allí en un decente nicho: aquí estuvo muchos años, venerada de los propios del país, y estrangeros.”
En 1623 un hombre de Bot la sacó de aquel nicho para venerarla en su casa. Enfermó toda su familia y entonces decidió devolverla a Valjunquera.
Nuevamente fue robada en 1677. Siete hombres la buscaron por diversos caminos y Gerónimo Lamberto la encontró cerca de Torrecilla en un pilar que llaman La Piedad.
Una vez devuelta a Valjunquera, el pueblo dispuso edificarle una ermita frente al lugar donde se hallaba el antigüo nicho. En 1697 se comenzó la obra y el uno de octubre de 1699 se trasladó la imagen a su nueva sede.
Su fiesta se celebra el viernes siguiente al domingo de pasión.
Hay muchos exvotos en esta capilla. Entre ellos se ve una mortaja ofrecida por Catalina Meseguer por haber sanado a su hijo Joseph Ardid que estaba desahuciado por los médicos. También una pierna de cera. Entre los prodigios atribuidos, se cuenta la salvación de los valjunqueranos Andrés Laflor y Jaime Cuella que eran arrastrados por las aguas del rio Segre.
La información anterior es un resumen de lo escrito por el padre Faci en 1739.”
Y l’agüelo “Sebeta” u ha copiat tot de la Revista Escolar El Gabarato, la número 6, de 1988.

FIN.

Los milacres del “Sebeta” 4, LA TIARRA


Los milacres del “Sebeta” 4, LA TIARRA

Lo segundo milacre te que veure en la tiarra, un atre dels elemens del món.


“Un día l’agüelo “Sebeta”, en menut, tenie que aná al campo, en la burreta. Ere estiu, habien segat un campo y ñabie que rasclechal, avans de que los animalets del campo (cachapets, perdius, uns atres muisonets, les rates de campo, les formigues y algún que atre jabalí), se mincharen les espigues que se habien quedat tirades, perdudes, per entiarra.

Va prepará la burra en la albarda y carrechadós y a un costat, va ficá lo rascle, en les púes de fiarro apuntán capa fora, ben lligat. Va muntá ell damún, escarramat, y sen va aná cap lo terme de Fórnols. Anabe un poc tart perque ere domenche y se habíe quedat a misa machó; fen de monaguillo, achudán a misa al mosen.
Fae caló; anae pel cantó del tancat; estabe mich atontat o dormit y no va veure una aigüera que ñabie al mich del camí. Lo pichó va se que la burreta tampoc la va vuere, li va fallá la pota, va entropesá y va caure capa lo seu costat isquiarro, chustet agon anave lo rascle.
Va caure lo animal; pero tamé va caure lo sagal; los dos capa lo matéis costat; capa la isquiarra; en tan mala sort o en tan bona grasies a deu, que les púes del rascle se van clavá an tiarra, a tota la voreta del pit del menut, un poc mes y haguere ñagut una desgrasia, pero no; ahí estabe lo segundo milacre. Deu nostre siñó lo volíe pan ell. Los foraets de les púes del rascle, al clavás an tiarra, se van quedá al camí; eren testigos, que pronte desapareiserien, de un milacre menut, que li habie pasat al “Sebeta”, menut.”

LO AIRE:


Tersé milacre, este tenie que veure en lo aire, un elemen mes del mon.

“Lo “Sebeta” teníe un tio, mol bon home; que cuan prenie vermut al bar de la plasa, y si li arrimae lo crio, sempre sen duie alguna oliva rellena, algún berberecho a la boca,  y una rubia (peseta) a la borchaca.
Este home cantabe mol be la jota y tenie una grasia especial pos se les inventabe de cualquier cosa que se li posae per daban.
Estaem a la época de la trilla; lo tio teníe la era a la cresta de un monte; l’aire li arrivabe per tots los costats, pero a cambi lo tallat (lo presipisi), rodechabe la obra de tota la era, menos per un tros que es per agon se arrivabe a ella.
Durán uns dies; la tia, la dona del tio, no podie acompañal a trillá; y ell tenie que está sol; pero, claro, entonses, cuan li tocae rechirá la mies, tenie que pará lo trill. Pa que no pasaré aisó, lo menut va aná a achudali.
Habien pasat tot lo matí be. Mentres lo tio rechirabe en la forca, Luiset, muntat damún del trill, donabe voltes y voltes. Tot anabe be.
Lo que pase es que lo sagal, tenie ganes de corre; sense donás cuenta que la mula del tio ere mol fura y claro en un momen en que lo tio va aná a la pallisa, que estae allí propet, a beure aigüa; lo menut va agarrá la suriaca y la va pasá per damún de la esquena de la mula, pa fela trotá un poc. La mula va escomensá a trotá, donán voltes. Lo crio li va trová gust y li va pasá atre camí la suriaca per la esquena a la mula. Ésta la va notá y va escomensá a galopá a tota la velosidat, donán voltes per damun de la palla. Lo chiquet, que no se u esperabe, marechat per la velosidat y per les voltes, va piarde lo asiento y va caure del trill, anan donan voltes, per la forsa de la velosidat, hasta lo matéis rafec de la paret. Y allí va pará; chustet al cantó del tallat. La ma de Deu lo va aturá de dona voltes; no podie caure; lo nesesitabe ell, entonses; y mes tart, lo nesesitarie lo chapurriau.
Lo tio, que venie de beure, va pará la mula y lo trill y va aná corrén a mirá al nevot. No res; pa lo que aguere pogut sé; uns esgarraps per les garres y una nafra al chinoll. La trilla va seguí y lo día tamé.
No ere la seua hora; encara tenie que aná al seminari.”
Yo no sé en quina grasia vach escriure les meues aventures. Cosa rara; cap de retó me va cridá pa preguntam pels tres “milacres” meus; que me habien convensut de la cridadá de Deu al agüelo “Sebeta”.
Segur que alguns dels mosens que mos preparaben, sen enriurie o se enfotrie un rato; com vatres u feu ara; llechin les imaginasions de un crio de poble de once o dotse añs.
Pero, poc a poc, misa a misa; comunió a comunio; rosari a rosari; meditasió a meditasió; lectura espiritual a lectura espiritual; confesó a confesó; penitansia a penitansia; retiro espiritual a retiro espiritual; silensio a silensio; charrada a  charrada;……pa qué seguí; sempre ploven la mateisa aigüa damún del matéis terreno; nau; chove; te anabes convensín; o te anaben convensín; de que tenies vocasió y, al remat de tot, ya pareisie que Deu te habíe cridat a tú, a Luiset. Y vach está un tems que estaba convensut de que valía pa retó; de que volia sé retó; y de que sería retó. Lo mosen habíe tingut bon ull.
Y, ademés de tota la religió que mos donaben; al matéis tems mos preparaben pa la vida; sobre tot la vida de mosen; pero tamé pa la vida normal; de una manera que difisilmen mos aurien preparat a un atre puesto; aisó mai li u podré agraí al seminari, ni al reto del meu poble, que ben merescuda teníe la indulgensia per la meua “vocasió”.
Desde lo primé añ me van doná beca; de tal manera que la carrera de reto me la vach aná guañán; nota a nota; añ a añ. Cuan arrivaen les vacasions yo trevallaba a casa en la ocupasió que an aquell tems tenie la familia. A les vacasions de Nadal, a cullí olives, a pará rateres; a les del estiu a segá y a trillá; com un mes de casa; pos yo, entonses encara era un mes a aquella casa.
A camins me tocabe fe de menobré (peon de albañil), arrivaba a michdía del seminari; dinaba; y, per la tarde, a la obra; per denit les dos mans plenes de bambolles; de la “maseta” y del “escalpre”, tota la tarde fen una sequieta al simén pa posá un tubo. Al día siguien, les mans vendades, pero a seguí la sequieta. Als sinc o sis dies ya portaba durisies a les mans, al prinsipi tendretes, pero después dures, com un trevalladó mes.
Alguna volta; de cuan en cuan; sobre tot al estiu; a carregá camions per lo poble; en sacs de vuitanta kilos a les costelles; no sé cóm los podía puchá per una rampa (dos taulóns) de fusta a la caisa del camión. Cuan ere blat, tira que te vás; pero cuan ere sibá, lo maldit pols, se te agarrae a la esquena, se te pegae a la carn y no ñabíe aigua que te rentare, ni res que te calmare, cóm picae; y tú a rascá, a rascá.

Seguirá....



Los milacres del “Sebeta” 4, LA TIARRA, mules, burros


Los milacres del “Sebeta” 4, LA TIARRA, rascle

Lo foc

Ara cuan se arrime lo fret, me ve a la memoria aquells tems en que no ñabíe calefacsió y la cuina y la estufa eren coses de chen acomodada.

Lo foc

La chen sensilla sol teníe lo foc bais y alguns sortuts un brasé pa la taula redoneta, eissa a la que li diuen “camilla”.

Pa dormí se portáe la bossa de aigua calenta, lo tobot recalentat, los calsetins gorts y la caloreta del que dormíe a la teua bora.

Ñabíe mantes y a camins borrases pa dormí damún de la palla de la pallisa, sobre tot cuan veníen hostes y sels dissáen los llits, ni bons ni ruins, los únics que ne teniem, p’an ells y los de casa en les mules que tamé donaén caloreta y alguna que atra oloreta, pero an aquells tems los nasos no eren tan fins com ara. No ñabíe ambientadós si acás algún manoll de romé o timó florit, penchat de la llumera del techo, que tamé donáe bona oló.

Tot l’añ se anáe replegán lleña, tenín en cuenta que tot l’añ fae falta pos se fae lo minchá al foc en los topins, les caseroles, les olles y les paelles, en les seues corbetores (cobertores), posanlos a la bora de les brases, de la siandra.

No se desperdissiáe res, tot se aprofitáe. Me enrecordo de les oliveres que se secáen o que ñabíe que arrencáles perque molestáen o perque se habíen tornat bordes. Prime en lo serrucho de dos mans, ben engrassat en un tros de cona del pernil, se talláe lo tronc o los troncs que tinguere y se trosecháen, en lo mateis serrucho, en lo de una má o en la estraleta. Se fáen troncs curts, pa podels portá a casa. Y allí, cuan plovíe o neváe prau pa no podé isi de casa, a la entrada o al corral, lo que ne tinguere y sino al carré, en la estral gran se fáen ascles. Éstes se replegáen a un clapé, aprofitán, sobre tot los puestos que quedáen vuits, davall de les escales. Allí ben ordena(d)es, en los troncs menuts.

Tamé se guardáen les ascletes, les rametes y los papés. Tot asó es lo que primé se posáe al foc, se enseníe en un misto y cuan preníe se anáen posán troncs y ascles cada camí més grans hasta fe una bona foguera.

Al puesto del foc, a la cuina, se fáe lo foc an tiarra, ñabíe una plancha que se posáe contra la paret, pa que no se recalentaren los tobots o los tabics de la paret en les flames. Tot aissó estáe devall de una chumenera, per aón sen anáe casi tot lo fum, dic casi tot, perque una part, l’aire del carré lo fáe revocá y tornáe per avall, plenánmos de fum y d’oló de fum pa tot lo día, sobre tot lo pial del cap.

M’enrecordo que la nostra plancha teníe la figura de San Miquial, lo San del poble, calsigán al dimoni, es com si ademés de la caló a la paret mos guardare del foc del infiarn.

Ñabíe una mancha pa bufá la flameta menudeta, sobre tot cuan la lleña estáe humida, o al prinsipi cuan se enseníe lo foc y se tornáe a apagá.

Com es natural se fáe molta siandra que después se empleáe com abono pal campo, ya u hay dit mols camins, no se desperdissiáe res, natres SÍ que ressicláem, no com ara.

En la fusta de algúns álbres, ñabíe que tindre mol cuidau, pues esclafáen y soltáen un mun de purnes que eren mol perilloses, pos podíen pendre a la lleña que estáe de reserva o a cualquiera que estare a la bora, y an aquells tems no ñabíe extintós, si acás algún sifó de la casa Arrufat de Valderrobres. (Copet)

Cuan lo trevall del campo dissáe algún día lliure que ere casi mai, mos dedicá(b)em a arrencá les soques de les oliveres talla(d)es. Se fáe un forat a tot lo voltán hasta descubrí tot lo tronc y les arraíls que ñabíen dintre de la tiarra. Lo que podíem u serráem en lo serrucho de dos mans. Lo demés se fáe en una estral gran; se claváe a la fusta, a on conveníe, y después se posáe un tros de fiarro, com si fore lo cap, lo tall, de la astral, y a pegá en un mall, saltáen chispes y trossets de fiarro, hasta que se conseguíe badá la soca, sino se posáen mes trossos de fiarro y se golpecháen hasta conseguíu.

Los trossos grans que se anáen soltán, se partíen mes menuts y a casa, a esperá la neu, pa fe ascles y guardales al clapé pal inviarn o pa cuan faren falta.

Ya tením lo foc y la lleña a la habitasió que li diem cuina. Al voltán del foc ñabíe cadires de fusta, de corda normal y de corda de palla. Allí, cuan arriváe la nit, mos sentáem tots, ben pretets pa que no se escapare ni una caloreta, tenín en cuenta que per les escales pucháe un fret que se coláe del carré per les rendijes y les bades de la porta.

Al “RACONET DEL FOC” se posáe la persona més importanta de la familia, lo agüelo, ere lo jefe de la familia y eisse puesto li estáe reservat, dingú se atrevíe a lleválu, ell teníe lo feis de la lleña a la seua bora y sabíe cuan teníe que afechí un tronc.

Allí se depreníe la vida, ere la universidat dels críos, les persones grans parláen de tot y tú escoltáes y te empapáes com una esponcha de tot lo que sentíes. Ya sabeu “cuan sigues pare mincharás aus.”

Soliem comprá sardines de cubo ,ere un dels minchás més barats, te les veníen embolicáes en un papé fort, crec que ere de estrasa.

Cuan paráem rateres y teníem sort y caíen torts o muixonets, los peláem al voltán del foc tirán les plumes a les brases pa que se cremaren. Als bichos los traiem les tripetes y la mollega y les posáem a les brases en un tros de aquell papé de estrasa, en un chorret de oli y un pessiguet de sal. Qué bones estáen. Si algú camí podeu, probeules.

Algún día si neváe mol y no se podíe eissí al carré o si l’agüelo estáe malal lo veíes al seu racó pegan alguna becá, mich sondormit.

Me preguntaréu ¿per qué tos conto estes coses?, pues perque ara que yo ya soc tamé agüelo, com fa este fret, trobo en falta lo racó del foc y sobre tot trobo en falta a m’agüelo. Bona nit agüelo José.

FIN.

Mondongo

La parella de persones que mos acompañen, están vivín a una época diferenta a la nostra, per aissó les coses que los passen y que ells viuen, ña que posales an aquells tems y no ara, perque algunes no se comprenen an estos añs nostres. O sigue que los que pugáu, tanqueu los ulls y torneu atrás, los demés feu un gran esfors y llichíu la charrada y poséutos les ulleres de aquella edat.
Avui mos situem als primes mesos de un añ dels sesanta o aissí.

Luiset, Chum, gorrino, Valjunquera, mondongo, matansa
Luiset, Chum, gorrino, Valjunquera, mondongo, matansa


-Bon día yayo.

+Bon día sagal, se te han pegat los llansols.

-No, que ya fa un ratet que me hay eisecat. Ya me hay minchat les sopes escudelláes. Ara estaba preparán uns panellets (se preparen en figues maellanes, passáes per farina, ubiartes per la mitat y dintre se pose una armela llimpia o una nau pelada), pal camí.

+ Dónat pressa, sino mentres parem y no parem les rateres, arribarém al campo a la hora de diná.

Aissó ere una costum, al aná a replegá les olives, algú de la familia sen anáe per dabán y paráe unes rateres p’als torts; les posáen en cucs de la farina que relluisen mol, pa que lo muissó, al aná volán lo vesque y baiso a “picá”.
Mentres fáen camí se solíen minchá alguna figa en algo dintre o algún orelló, pa pasá lo tems, mentres buscáen los millós puestos pa pará les rateres.
Ña que tindre en cuenta que an aquells tems, casi tots los díes se senáe lo mateis, un plat de col del hort y un tort de segundo, de postre unes olives de les d’aigua. No ñabíe res més, encara duráe la pobresa de la guiarra y lo peis y la carn estáen casi prohibits perque no ñabíe dinés pa compráls.

Sin embargo los torts eren barats, piarde un poc de tems al aná y al torná del campo, pa pará y reconéisse.

Lo agüelo en una eissadella a la má, lo menut en un feis de rateres y lo “potet” a on estáen los cucs, mentres lo gran preparáe la paraeta, lo sagal posáe lo cuc al ganchet, sempre trián los més gorts y relluéns.

A unes atres charrades ya hay esplicat com se solíe fe la paraeta y tot lo demés del asunto de les rateres.

Ara está prohibit y si te pillen en rateres, te denúnsien; an aquells tems, sense los torts no haguerem pogut viure.

Per la tarde, al plegá la faena, mentres los demés carregáen los animals, los de les rateres sen anáen per dabán, a la seua, a reconéisse y replegá les rateres. Ara portáen una sistelleta pa fica dins la “casera”, encara que algún camí, pocs grássies a Deu, fáen “masola”, o sigue no habíe picat res o algún animal, les algarses, los corvs o alguna rabosa, que tamé ne ñabíen, habíe “reconegut” avans qu’el amo y se habíe minchat lo muissó; en eissos casos a la bora de la ratera buida y disparada, ñabíe un mun de plumes.

Cuan se arribáe a casa, casi sempre al mateis tems, los uns y los atres, se descarregáen los animals, se triáen les olives y al racó del foc a pelá los torts, pa adelantá faena a les dones y que los pugueren frechí o fe en salsa, según lo díes.

Les plumes se tiraén al foc, y en un trosset de papé se posáen les tripetes a rustís a les brases en un chorret de olí y un poco de sal. Alló ere lo vermut de avans de sená y se fáe aguantán la oló, bueno la pudó de les plumes cremáes.
Fáe uns semanes que habíen matat lo gorrino del añ.

Al día siguién va eissí plurigañós y com tota la nit habíe estat pluviñán, no van podé aná al campo. Mentres uns fáen lleña en lo tronsadó, lo serrucho de una ma y les astrals, la gran y la de ma, lo agüelo y lo net teníen un atre trevall.
La “caseta del gorrino”, soll a Fórnols y a uns atres puestos, ya casi se habíe eissugat del tot dels pixúms del gorrino vell. Ells van rascá totes les parets, les van encalá, blanquechá en cal.

+Venga menut que paréis que portes caparra o galbana, més depressa eissa brocha.

-Ya vach, pero ¿per qué li ha posat azulete (blavet) a la cals?
+Mira que eres alcahuet, tot u vols sabé. /bachillé a Beseit/
Y al matéis tems que li despentine lo pial, en la ma, li va esplicán:
+Asó son coses dels añs que fa que hay nascut, lo tems te enseñe algunes garrames, la cals es masa blanca y aguante poc la brutíssia del gorrino, pero si la mescles en un poquet, hay dit poquet, de azulete, sense dissá de sé blanca, se oscurís un poc y aguante milló les taques. Ya saps que los gorrinos tenen costúm de arrascás mol assubín en la paret.

-Ya está pintá, ya m’en puc aná a chugá als indios y als vaqueros.
+Eh!!!, para un poc, que, encara no te has guañat lo chornal, que sol ham fet les parets, ara falte lo den tiarra, porta lo chapo (com una eissada, pero semicircular), rascarém la tiarra, la rentarém en zotal y lejía y cuan estigue ben eissuta, posarém palla nova, pa cuan vingue lo nau se trovo una alcoba llimpia y guapa. O es que a tú no te agradaríe, ya que te aparten de ta mare y te dissen sol a un puesto nau, trova una bona caseta pa pode minchá y dormí.
-Home!, pos claro. ¿Cuán lo comprarém?

+En cuan pregonon que ne han portat al “sechá” (plassa aon normalmen se posen los venedós ambuláns en los seus “tenderetes”.
-¿Podré acompañali a triá lo més majo?

+Claro, menut, que tú eres un “entés” en gorrinos y saps mol de compres y ventes –li conteste l’agüelo, mentres sen enfot un poc de lo “sabé” del net -.
Y la vida seguís a l’Aldea.

Un día mentres van parán, per lo mich del monte, los is un cachap de poques semanes, Luiset que lo veu, solte les rateres y a corre detrás, lo agüelo rien, sap lo difíssil que es casá un conill corrén y menos un crío, pero li fa grássia un “cachapet” (enrecordeutos que als de la Aldea, de mote, los diuen cachaps) corrén detrás de un atre cachapet.

Ya sap quí guañará lo animalet está al seu terreno, lo crío en los pantalóns curts, esgarrañánse totes les garres y entropessán en totes les plantes del monte; si es romé o un timó, tira que te vas, pero si son archilagues o coscolls esgarrap segur.

Lo crío y lo conill se piarden de vista, per la espesura del monte. Al poc, torne lo crío, paréis que porto mala cara, sol se li veu lo pit, segur que porte totes les garres nafráes, pero bueno es una esperiánsia més, aissí es com se deprén a esta vida dura nostra, la del campo.

Lo agüelo lo espere a la vora del feis de rateres.

+Hala anem, que ya tenim una massola, sino mos doném pressa ne farém un atra, los més matinadós ya mos haurán furtat los millós puestos pa pará.
“Sebeta” escomense a caminá, pero li estrañe que Luiset no se vasque queixán, se chire pa preguntali si li pase algo y se trobe al sagal que li enseñe un cachapet de semanes, lo porte agarrat de les potes de detrás, la cara del menut u diu tot ha guañat la primera batalla de la seua vida, de una guiarra que será llarga y damún la ha guañat dabán de s’agüelo, al que vol tan.

Lo vell pille al conill y li pegue un golpe fort y sec detrás de les orelles, lo desnuque; lo bicho ni se ha enterat, ya está corrén per los montes del sial; éste ya no se escapará.

Cuan arriben al campo y conten la aventura als demés de la familia, tots felisiten a Luiset, encara que porte les garres plenes de moradures y esgarraps, ell está contén.

 Lo animalet cuan lo han vist ells, a sabé cuán rato portáe corrén y de quín esparvé, rabosa o gos se anáe escapán, debíe está cansat y al veure que lo crío eissíe detrás d’ell, li ha vollgut engañá y se ha amagat detrás de la soca de un , pero lo sagal té bona vista y se ha donat cuenta y se li ha tirat damún agarránlo. Se ha guañat la cuixeta.

A Luiset no li ha fet molta grássia que l’agüelo matare al animal, pero, per dintre, ha entés que es ley de vida. A casa algúns camíns ha vist a sa mare y a la agüela matán gallines y conills. Les persones pa mantíndres tenen que minchá y a camíns es nessessari tría ells o natres.

“Sebeta”, al veurel “pesaros” li vol esplicá la vida y u fa de una manera espessial, comparán coses.

+Mira, los animalets que están a este mon al matéis tems que natres están ficats pa achudamos, ya veus los animals de cárrega, sense ells no podríem treballá los campos; los del corral mos donen aus (ous) y carn; algúns del campo lo seu canto y la alegría de veurels volá y disfrutá dels seus colós. Tots fan algo bo pa natres.

- Pero la rabosa mos se mínche los torts de les rateres.

+ Pero tamé los conills que están malals pa que no passon les enfermedats a uns atres, mos llimpien los campos dels animalets que se moríssen y en lo seu minchá tamé llimpien de algarses y uns atres animals que sino se faríen masa abundáns.

+ Tú, cuan te minches lo tort, te minches la seua vista, per aissó has segut espabilat y has vist com lo cachap se amagáe. Cuan te alimentes dels conills, ressibisses algo de la seua velosidat, per aissó has corregut tan depresa y has alcansat al animalet. Y aissí podríem di de tota clase de animals que mos acompañen. Tots mos enseñen o mos donen algo.

Cada edat, cada tems, te los seus cuentos, lo importán es si mos enseñen algo y ña persones que han nascut pa contá cuentos.
Al inviarn es normal que ñague díes grisos, díes oscurs, que plogue, que fasque boira, fret y aire y hasta que nevo.

Un día va nevá mich pam. Lo ruin no es que piárdegues eisse día, sino lo siguién y a lo pichó hasta lo atre, mentres se revén la neu y la tiarra esta chelada o plena de charcos; no se que es pichó pa treballá a la agricultura.
Pero no tot es pa ruin, lo día de la nevada pregonen que lo día de demá, si lo tems u permitís, ñaurá venedós al “Sechá” y si a algú li fa falta ñaurá un que portará gorrinets.

Aissó anime a la nostra parella, un día o un atre teníen que comprá lo gorrino y ara aprofitarán lo mal tems pa ficál a la caseta y mirá com se trove allí.
An aquells tems este animalet ere mol nessessari a una casa, no sol per lo que se traíe lo día del mondongo, sino perque ere una manera de aprofitá moltes coses de les que empleáen a casa. Allí anáen les peladures de les pataques y de totes les verdures y hortalises, se posáen al calderó, se cuitíen y en un grapat de segó o de panís ya teníes minchá pa dos días p’al gorrino, damún que “resiclaes”, ell anáe engordín y tú tenies la casa llimpia de sobres y recuencos.
Aquella nit Luiset casi no va dormí. ¿Com seríe lo gorrinet? ¿Serie manso o furo? ¿Podríe trial ell? Cuán tardáe en fes de día. Y pensán en estes coses, se va dormí. Escomense a ensomiá y de repén lo gorrino se ha fet mol gran y li está pegan espentons, li estire la roba y te fret….
Es lo agüelo que li cride al tems que li lleve la roba de damún pa que se despiarto avans
+Hala bon moso, que mos quedarem sense gorrino!
Lo menut se despiarte, te taragañes als ulls, al remat se done cuenta de quí li cride y se enrecorde que avui es lo día. Se eiseque corrén, se vestís a tota presa, se rente, ya te les sopes bullides damún de la taula, se les minche en un Jesús y ya está preparat pa aná en lo agüelo, menuda parella fan los dos.
Per lo carré del mich, per la costa de les mules y al Sechá. Allí, a la bora de les coves, chun a les escaleretes ña un camión menut en un home a la bora. Se arrimen, Luiset com es menut, puche per les escales, desde allí veu que dintre de la caisa, a la que li ha llevat lo toldo, ña una dochena o aisí de gorrinets, encara que tenen un poc de palla davall, deuen tindre fret, en lo horache que fa lo fiarro de la caisa deu está chelat.
Un dels gorrinets se li quede mirán, te una taca negra a la orella isquiarra, se miren, lo gorrino mau lo cap y li seguís mirán.
“Sebeta” parle en l’home, se posen de acuerdo, ne ñan uns un poc més grans, poc, y uns atres uns sentímetros més menuts. Uns a diau duros, los atres a nau. Mire a Luiset:
+¿Ten agráe algún més que los atres?
-Si, yayo, eise de la taca a la orelleta.
Lo agüelo mire eise gorrino, puche y baise lo cap, sí, ha triat be, parle en lo home:
+Eise que diu lo sagal ¿per cuán mol dise?
*Bona vista, eise es dels més espabilats, diau duros.
+Home! Que te una taca a la orella.
*Per aiso mateis, eisa taca tamé la té son pare, es lo milló mascle que ting.
+Pero home, eisa taca li lleve lo bon aspiacte. Perque se ha encaprichat lo sagal sino eise ni lo miraría. Nau duros.
*Venga ni pa vuste ni pa mi, coranta y siat pesetes y no li rebaiso ni un siantim més.
+Pues perque li u hay prometut al menut, sino…..
Se donen la ma, “Sebeta” trau la cartera y conte nau billets de a duro y dos de a peseta. Lo home intente agarrá al gorrino, pero este se li escape, chillán, varies voltes, al final lo pille de la garra trasera dreta y los u done, encara chille.
“Sebeta” lo agarre als brasos com si fore un crio menudet, lo sagal baise de les escales y li pase la ma per lo llomo, lo animalet, se calme, se pare de maures y de chilla. Serán bons amics.
-Grasies, yayo, ara que ya es nostre, ¿es mascle o femella?
+Es un masclet.
-¿Me dise que lo batecha?
+A ver ¿que se te ha ocurrit? -Diu l’agüelo, al tems que mire cap lo campanari que se veu desde allí bais-.
-Pos li vull posá “CHUM”.
+¿De la chumenera?
-No dels chums de les bases.
+Hala, pos ya té nom, enguañ tindrem un CHUM.

Tot contens, arriven a casa y solten al gorrinet a la seua caseta. De momén, com si estare asustat, se quede a un racó. La familia se arrime a veurel, l’agüela agarre una almosta de granulos dels conills y lu pose al minchadó, a la vasía, después li fique aigua a una lata y la dise allí a la bora.
Lo animalet se arrime, probe los granulos, pareis que li agráen, se fique a minchá com un descosit, com es menut casi no arrive al minchadó, se eiseque sobre les garres de detrás y se fique a minchá afanós. Tan despistat está intentán arrivá als radés granulos que no se done cuenta y en les potes de detrás entropese en la lata y hala l’aigua per an tiarra, tots sen enriuen, avuí no es un día pa enfadás, ya tenen gorrino y mol gorrino.
No tos vach a cansá contautos la vida de Chum, ya sabeu que es mol aburrida, en cuatre metros cuadrats, a minchá y a dormí, menos los domenches per la nit que es dichuni. A engordí y engordí, sense veure la llum del sol.
En eise añ que viu té momens bons y uns atres ruins; de estos radés se enrecorde sobre tot del día que lo van capá, que mal li van fé.
-Yayo, ¿Per qué lo capen?
+A ver si te u sé esplicá. Tu notes eisa oló a gorrino, casi pudó, pos ya vorás als dos o tres mesos de operal sen anirá eisa sensasió; se engordirá més que es lo que a natres mos interese pa que isque més mondongo y ademés no se tornará furo, será més manso.
-Val, val, ya me ha convensut.
Un gorrino comprat a prinsipi de enguañ, a la hora de matal solie pesá entre vuitanta y novanta kilos en canal, encara que ñabíe cases que los debíen de empapussá y arribáen als sen, sen diau, sen vin y hasta sen trenta.

Los ratos bons del gorrino, casi tots teníen que veure en Luiset, sempre que podíe, cuan li donáen de minchá li agradáe está daván y li cridáe per lo nom. Hasta lo pun de que més tart li gastáe alguna broma. Cuan lo animalet estáe chitat, Luiset cridáe: Chum, Chum y lo bicho se eissecaé enseguida y acudíe al minchadó, creen que li portáen més minchá y allí no ñabíe res, li habíe pres lo pial.
La porta de la caseta ere de fusta en un forrallat per de fora; per la part de bais teníe algún tros de fusta querat, minchat per la carcoma, cuan teníe fam, assomáe lo morro per aquell forat, Luiset, si estáe prop, se arrimáe y al mateis tems qu’el cridáe, Chum, Chum, li donáe una mansana, sobre tot les que estáen cucáes, o un tros de panolla de panís, lo afarám la engancháe y se u mincháe tot, no dissáe ni lo suro de dintre, per si a un cas se quedáe algún gra enganchat.
Parlán dels ratos bons, Chum va tindre la sort de que eisse va sé un añ bo de melons, sobre tot de carn, pero, a causa del tems que no va fe masa caló, van madurá mol tart y entonses mols los van cullí “pepinos” y ya sabeu quí se va aprofitá de aissó, cada tripada, cada fartó, pero sempre lin apetíen més, sempre ne volíe més y damún los u portáe lo seu amic. Lo cridáe Chum! y meló viart, a trossos, al minchadó. Going, going, que bo está lo meló y que bo es lo seu amic.
Ere costum de casa, no sé si a la Aldea o a uns atres pobles faríen lo mateis, que los domenches per denit no li donáen de sená, com ere festa, sobráen menos coses de diná y la chen descansáe per la tarde.
Y poc a poc se va pasá tot l’añ y va arribá chiné del añ siguién, als primés dies.
Van buscá un día qu’els vinguere be a tots, van comprá les espéssies y les demés coses que fáen falta pan eisse día. Van prepará barreños, calderes, capoladora en les seues cuchilles, embutidora en los seus tubos, tenalletes, cañíssos y moltes coses més. Trossos de caña pa podé pencha les burrifaldes dintre de la caldera, una bobina de cordell fi pa lligá tot lo embutit. Alló ademés de sé lo día de la matánsa, ere una gran festa familiá.
L’agüela habíe fet galletes de casa, rosquilles, mantecats, nuguets y casquetes y habíe preparat anis y ví de naus, tot u teníe en una bandeja a la despensa que estáe a la mateissa entrada.
No sé perqué a la familia ñabíe persones espessials, cada una enteníe de una cosa, la mare les burrifaldes, l’agüela lo foc, que no se apagare may, que sempre estare ruén, eisse día teníe que sé aissina. Ñabíe una de les tíes que ere espessialista en les espéssies, cuan estáe la mescla de carn preparada, ella se sentáe en una cadira, daván del barreño, los demés fenli rogle, no se podíe fica tota la sal de una volta perque te podíes pasá y lo embutit que fore eissiríe salat, ella u fáe milló, anáe afechín sal y espéssies, poc a poc. De cuan en cuan preníe un pessiguet de la mescla y sel posáe als labios, lo probáe, donáe la seua opinió, movén lo cap, si lo movíe de un costat al atre ere que no estáe al pún y a seguí posán, hasta que se convensíe que eisa proporsió ere la ideal, entonses movie lo cap de dal a bais y se enriebe un poquet, bona señal, tots en una risseta a la cara. Hasta eisse momén sol ella probáe la mescla. Ara cuan habíe arribat a alcansá la perfecsió, ya ne dissáe probá als demés que, com es normal, tots donáen lo visto bueno.
Los demés que tamé estáem allí, erem portadós (ara portam asó, ara portam alló) y probadós (uns camins perque mos u donáen a probá, uns atres perque alguna má aprofitaé que no la miráen y pilláe algún pessiguet o grapadet de cualquier barreño, en les espéssies de la tía, tots estáen bons).
A la vora del foc, se habíe preparat un bon clapé de lleña, eisse día no se podíe piarde tems en puchá y baissá, sol se estáe pal mondongo, ere lo seu día.
Lo gorrino ya va está sense minchá dos díes avans, pa no tindre res als budells que un camí llimpiats y rellimpiats serviríen pa embutí les burrifaldes, les grans y les fines, les butifarres, y los fils de chorissos y les llonganisses.
Lo día de avans van bullí la sebá pa les burrifaldes y la van dissá tota la nit, dintre de un sac penchat al balcó pa que se escurrire be. An aquells tems los carrés eren de tiarra y l’aigua que escurríe del sac, caíe al carré y éste se la embebíe.
Después de sená, una sombra va baissá a la entrada, a on estáe la caseta del gorrino, no se van sentí palabres, sol suspiros y gruñits, ere la despedida de dos amics, amics de un sol añ, pero amics, un habíe batechat al atre.
Eisa nit la chen se retiráe tart y al matí siguién, a les tres o les cuatre, encara que ere inviarn, tots per amún.
Y aissó que lo sacrifissi solíe escomensá a les sis, pero ñabíe que ensendre pronte lo foc y posá aigua a bullí, pa pelá al gorrino.
Insistisco atre camí pa que tos enrecordeu que asó passáe fa mols añs, avui o no te dissaríen matál o nessessitaríes un permís espessial, ells diuen que es per la sanidat, yo crec que ademés es pa cobrá mes arbitrios. Si an aquell tems lo gorrino ere fundamental, dell se aprofitáe tot, ará tamé alimente a algúns achuntaméns, tamé se aprofiten dell.
Vach a intentá contátos una tragedia, la que parle de la mort, lo sufridó es Chum, uns atres son artistes secundaris y los demés invitats.
La entrada tindríe uns diau u onse metros cuadrats, per an tiarra palla estesa, per allí, eisa matiná, podíe corre l’aigua o la sang y no ere cosa de que dingú patinare; a un costat una portadora preparada, al mich una taula allargada e inclinada cap avan, cap lo carré. Per tot lo voltán de la taula un reglet menut clavat a la fusta, pa que ñaguere com una paret menudeta a tota la taula, tota no, en lo tros que donáe al carré, lo regle dissáe los cantóns y se anáe chunín hasta dissá sol un pam de separasió. Ere la taula pal sacrifissi, la taula de matá-gorrinos que anaé de entrada en entrada, cada día a una casa, pero sempre servíe pa lo mateis, pa mata a un animalet que no habíe fet cap de mal, sol minchá y engordí tot l’añ.
Lo invitat prinsipal ere un home que portáe un mono blau, damún un devantal de cuero hasta lo pit, y per davall unes botes de aigua. A la seua sintura una correcha, en una funda, de la funda eissíe un mánec, pareissíe de un puñal, alló no podíe di res bo, pero es que a la ma dreta portáe un fiarro y eise fiarro acabáe en un gancho, puntiagut. Pero aquí ¿qué va a passá?

En eissos ferraméns preparats casi tindríem que avisá a la Guardia Sivil, no sigue que paso una tragedia.

A les escales una dona, arremangada hasta lo muscle, porte un devantal blanc que pareis nau, entre la ma dreta y lo costat descanse un barreño gran, vuit, llimpio, sense res.
A la dreta de la taula assessina está la caseta del gorrino, lo pobre animal al sentí tan soroll, no rechiste, ni se mau y aissó que porte dos díes sense minchá; no sap perque li han posat eise cástic. Lo seu amic se ha assomat a veurel per damún de la varana, li ha dit adiós, ¿per qué se despedis? sen anirá a algún puesto. Li ha paregut que per la seua cara baissáe una gota de aigua, va!, se acabaríe de rentá o serán alusinasions meues, com porto dos dies sense probá res, me u estaré imaginán.
En lo passadís que ña, a la dreta, entre la paret y la taula, los homens forsuts, preparats als dos costats del pasillo, lo Luiset, a la bora de la caseta, detrás de tots.
Ya han repartit los papés de la actuassió: aubrirán la porta de la caseta, com fa dos díes que no minche, ficarán lo calderó, sense res pero aissó lo gorrino no u sap, a la bora del de les botes de aigua, cuan lo animal isque y se vasque arrimán, lo “asesino” lo enganchará en lo fiarro ganchut, per davall de la barba, tot los homens se tirarán damún y cada u lo agarrará de una pota, Luiset de la coga, diuen que pa que no se envasque per abán y cuan lo matarife digue “ARA” tots a una lo pucharán damún de la taula y allí……..





Abans de escomensá la funsió, me empeño en advertítos que yo sol vach está en dos o tres matanses, entonses tos conto lo que un sagal, un Luiset cualsevol, se pot enrecordá de algo que va pasá fa sincuanta y sinc añs o més.
Per un atre costat, teníu en cuenta que a cada puesto se faé de una manera, tamé a cada poble ere diferén y hasta a cada casa de un matéis poble, o sigue que llichiu asó com una charrada més del agüelo “Sebeta” y, si no esteu conformes, detrás de estes ralles escrites, poseu les vostres opinions, les vostres crítiques, no li tingáu cap de compasió.
Les sis en pun, a eissa hora, an aquella entrada de la Aldea se fa un silénsio total, si acás se sentís algún suspiro de un crío; lo del devantal de cuero agarre lo gancho de fiarro en les dos mans, més fort si se pot, done uns pasos hasta ficás a la bora del calderó vuit, la dona del barreño de la escala, baise a la entrá y se fique a la seua dreta, lo barreño preparat. 

Tots tensos, esperen, lo matadó baise lo cap, es la señal, tots preparats, algú aubris lo forrallat y la porta de la “caseta del gorrino”. Chum se trove un piná de garres que sol li disen un camí, escomense a pensá mal, pero allí al radé está lo final, lo calderó del minchá y ell porte dos díes sense probá res, sen va diriacte cap an ell.

Cuan está casi arribán, lo home del mono pareis que li acaríssio la barba en un fiarro que porte a la ma, de momén sentís un mal mol gran, li ha clavat un fiarro a la barba, per la boca li ha eissit una den més, una den de fiarro, pero qué doló més gran.

Y sentís com un bram que diu: “ARA”, y damún del seu cos sentís un mun de mans y lo picho veu com unes mans que ell creíe amigues li agarren la coga. Lo eiséquen y lo fiquen damún de una taula, lo cap y lo coll al aire, fora de la fusta. No se pot maure, lo tenen inmovilisat. Lo seu amic estiránli de la coga, la dueña que li ha estat donán minchá y aigua tot l’añ, porte un barreño vuit y lo fique davall del seu cap.

De repén, a la llum de la bombilla de la entrá, un cuchillo relluis, Chum sentís un golpe al coll, pero aissó no es lo pichó, note que té un forat nau y que per allí se li escape la sang, se li en vá la vida. Vol chillá com avans, pero ni aissó pot fé, ya casi no sentís doló, ya casi no sentís res. Anáem cap lo matí y se acabe de fe de nit. Tot es oscuridat. Ya no ña res.

La sang que ha eissit a chorro un rato, mentres la dona la rechiráe, casi ya no cau, lo del mono blau, encara li fa dos o tres moiméns al cos del animal y ne cau una poca més, al remat, no chens. La dona seguís rechirán pa que se no se fasque dura, no se coagulo.

Lo mal ya está fet. Que escomenso la festa.
Estiren lo gorrino cap atrás, ya está al mich de la taula, ya lo podeu soltá, de aquí no sen ha escapat cap, seríe lo primé.

Lo radé de soltál es lo Luiset, está amoinat, per dintre diu unes palabres de despedida: “Adiós Chum, adiós amic meu”, encara mire atre camí al gorrino mort, no pot sé Chum, fa un momén estáe viu, pero allí esta la orella isquiarra en la taca que li acuse. Es ELL.
Después de la tensió del momén y al veure que tot ha eissit be, a casi totes les cares se asome una risseta nerviosa, ya se ha pasat. La agüela trau de la despensa la bandeja de les pastes y la pose damún del gorrino, tots trien lo que més los agrade, lo menut pille un nuguet li fa enrecordá a la coga de Chum, se repartíssen tasses, les botelles de licor pasen de ma en ma. Es una alegría que tape alguna tristó.
Algú encara sen fot del sagal:
*Ha ñagut un momén que casi mos escape cap la porta, menos mal que algún forsut aguantáe de la coga y ha pegat un estiró que lo ha tornat cap atras”.
Casi tots sen enríuen de la grássia, menos Luiset y lo agüelo que no disse de mirál, apenat.
Als sinc minuts, cada u dise la tasa a un puesto pa la próxima ronda y se retire la bandeja de les pastes, la agüela la torne ha umplí desde la cacerola a on guarde les atres.
Los homens puchen al foc, allí ña un calderó gran, ple de aigua bullín, cada un agarre un topí dels que ña preparats damún de la taula, lo umplís de aigua y baise cap a bais.
Allí no han estat parats lo barreño de la sang ya se ha puchat per adal, al seu puesto se ha posat la portadora, davall de la punta de la taula.
Lo home del mono a medida que li baisen l’aigua va escaldán al gorrino de dal a bais, hasta la coga la fique un rato dintre de un topí bullín, igual que les orelles y lo morro. Lo demés, venga aigua bullín per damún. Aigua que va escurrín per la pell del gorrino y al remat acabe en la portadora.
Cuan li paréis que eise costat ya está a pun, pare la noria dels homens y los topíns y en una espéssie de “cassoleta”, escomense a rascá per a on ha ficat l’aigua, lo va pelán, li lleve lo pial de la pell.
Al acabá un costat, li donen la volta y fa lo matéis per l’atre costat, los homes tornen a baissá aigua bullín, primé lo escalde y después lo pele.
Ya está afeitat, ara, llimpie tota la taula del pial que ha pogut caure y la rente en uns topíns de aigua. Te que está llimpia pa lo que vé.
L’aigua y la brutisia acaben de caure dintre de la portadora, después la durán al monte y la buidarán.
Li aubrís la tripa, trau tots los budells y los fique a un barreño, sel emporten per amún, allí ya na chen que los llimpiará un per un, después los donará la volta, los tornará al revés, y encara los rascarán en una cullera de fusta hasta que se tornon transparéns.
Los grans, pa les burrifaldes grans, los michans pa les burrifaldes fines, los normals p’als demés embutits.
Lo estómec, después de llimpial be, lo farán a trossets, chun en les potes y farán callos, eisos a un atre barreño.
Tráu lo feche, lo embolique en la “mantellina” / telet a Beseit, la pleura / y lo hu done a un home pa que lo pucho a dal del tot, allí está preparat tot lo asunto del mondongo.
Trau los sachíns, aquí tenen costum de fe ensachináes, quines pastes més bones.
Los pulmóns (lleus a Beseit) y demés parts de la tripa, y encara ésta una volta llimpies, les puchen al foc y les posen a bullí. Cuan ya estiguen, ñaurá que refredals, que móldrels, ficá les espéssies y fe la butifarra.
Ña un premio pa Luiset, trauen la vejiga, “la bufa” li diuen tamé. La llimpien, la unflen en aire y li fan nugos a la entrada y a la isida y la lliguen en cordells pa que no se envasque l’aire masa pronte y un balón pal menut. A la segunda potada en les albarques se desunflará o se reventará, pero ya no podrá di que no ha tingut un balón. /pilota a Beseit/
Li tallen les potes, cuan ya está tot lo estómec llimpio, lo posen achiñollat damún de la taula, es com si estare demanán perdó, ¿per qué? pense lo sagal, si lo pobre no ha fet cap de pecat.
Ya está la mitat del trevall fet, ara un atre respiro, un atra ronda, atre camí la bandeja de les pastes y los licors, que pan aissó habíen guardat les tases. Y casi son les siat, paréis mentira pero ha passat una hora.

An eisse momén arrive lo alguasil, lo matadó pille mostres, normalmén eren un trosset de costella, un atre del coll y un atre de la galta y, después de pendre una pasta y una copa, sen va depresa a casa del menescal. Mentres este home no dono lo permís no se pot probá la carn del gorrino. 

Y no disém de aclarí coses. A uns atres puestos, un camí que lo gorrino está mort, lo penchen de les potes de detrás y lo trosechen, paregut a com hu estem esplicán.
L’home del mono blau, en una espesie de astral menuda li talle lo cap, tamé se aprofite tot, lo servell, rebosat a pesiguets en au, ben frechidet; la llengua, les galtes, les orelles, tot. Lo que no se minche directamén, se bullirá y se farán callos o se moldrá y pa les butifarres.
Después se tallen les faldetes, los costats, se separe la grasa, la frechirán y la manteca que isque la ficarán a una tenalleta. De allí se traura pa fé pastes (per ejemplo los mantecats), pa brená, se untáe al pa y se posáe un poc de sucre per damún y hasta pa cuiná algúns plats espesials.
Después trauen los llomos, uns se frechirán pa “la tenalleta” o “lo topí”.
Llugo les costelles, normalmén se partíen y se frechíen, tamé pa “la tenalleta”.
Ñabíe algunes cases que, com a la carnisería tamé matáen gorrinos, compráen part de un o les “peses” que los apetíen y fáen lo mondongo més gran, mesclán lo de casa y lo comprat.
Les paletes, les garres de daván y los pernils, les garres de detrás, a medida que lo matarife les va separán del cós, un home en un devantal al muscle, les va puchán adal del tot, allí acaben de sangrals, pa que no quedo chens de sang dintre, los salen y los posen damún de un cañís en algún pes damún, a camins ficáen un o dos sacs de sivá damún.
Y an aquella entrada se ha fet un milagre, fa poc damún de la taula ñabíe un animalet, ara ya no quede res d’ell, ha desaparegut. Lo del mono blau, llimpie be la taula, te que serví pal siguien. Cobre lo seu trevall, un atra ronda, la tersera, la radera, tornen les pastes y los licors de despedida y después trauen la taula al carré, ell se la carregue a encostes y sen va en los seus ferraméns carre aván, en la taula a la esquena pareis una tortuga pero de les perilloses.
Casi al mateis tems arrive lo alguasil, no ña problema, lo gorrino ere bo, tol podeu minchá.
Luiset puche y baise lo cap, ell ya sabíe que Chum ere bo, estáe batechat, hu habíe fet ell, lo mateis día quel van comprá.
Lo alguasil encara arrive a tems pa minchás una pasta, cuan sen va, tots contens a almorsá: ña tallades frechides, pasta de les burrifaldes, un tros de cansalá a la brasa, en fin cualquier cosa que tos apetisque del gorrino.
Luiset y “Sebeta”, minchen tallades, lo crío poques. Cada camí que ne mosegue una, pareis que torne a sentí los chillits de Chum cuan lo han puchat damún de la taula, han segut ruins, ell tamé, lo teníe agarrat de la coga.
Com tots no poden está an aquella casa tan menuda, lo agüelo y lo sagal agarren la eisadella, les rateres y lo potet dels cucs y sen van a pará. Avui anirán per “La Telleria”, está prop. Aprofitarán pa fe algo per l’hort y tornarán pa diná en tota la familia.
Pel camí, mentres van parán, lo sagal pregunte:
-Yayo, ¿vuste creu que me ting que confesá que hay achudát a matá a un animalet?
+No home, ya te hu hay esplicat uns atres camins que los animals están pa servimos; que es un poc dur tindre que matals, pero no quede més remei; natres tením que minchá. Mira lo Chum desde la “caseta del gorrino” del sial te está veen y te perdone. Ara tú tens que fe lo mateis que ha fet ell. Ell, encara que lo han matat, mos está servín, fen be a natres. Tú tens que dependre d’ell y de ara en a daván, se bona persona en los demés, encara que algún camí te fasquen mal. Aisina ell te perdonará y tú estarás tranquil ya.
Lo menut mire cap lo sial, intentán adiviná destrás de que nugol estará la caseta de Chum y a lo milló hasta li veu la taca a la orella.
Los demés, sobre tot les dones pasen lo matí bullin, frechín, molén, mesclán, espesián, llimpian los budells y achudan a qui li fasque falta.
Poc a poc lo gorrino encara se va fen més menut, més a trosets, en cambi los barreños y les tenalletes se van umplin.
A totes les finestres se ha ficat tialametálica espesa pa que no entro “la mosca”.
La nit del primé día se dise la pasta de les llonganises y dels chorisos en adobo, pa que prenguen be lo gust de les espéssies , al día siguien es lo día de embutils. Eise día Luiset te trevall, te que apretá lo bras de la embutidora, més fort o menos según li va dien la persona que pose lo budell al tubet. Es com una “cadena” de una fábrica; una persona va umplin lo tubo de la embutidora, desde lo barreño, en una cullera gran de fusta, fique la mescla al tubo; Luiset es lo encarregat de apreta lo bras de fusta, es mol obedien, no pegue sostovons, no eisirie be, hu va fen de una manera pausada, pero manteninla pa intentá que sempre isque la mateisa cantidad de pasta y en igual de forsa, pa que no quedon bufes y lo embutit tingue consistansia; normalmén una dona, va posán los budells al tubet de a bais y dirichín a Luiset de cuanta forsa te que fé y cuan te que pará, perque lo budell está ple; un atra persona se encarregue de lliga les dos puntes en un cordell, preparán lo fil y si ha quedat alguna boseta de aire la punche en una agulla fina; finalmén un atra les va penchan pa disales a secá.
Cuan se acabe de fe lo mondongo done gust mirá lo grané en tot escampat; bueno replegat, venga pencharols per tot lo techo y lo demés estés damún dels cañisos, fa goch veure tot alló, ojalá tot lo añ estare tan plé.
Eise día ere normal pasá un “platet” en algo del mondongo als vehins del carré, ya que habíen aguantat los chillits del gorrino que segú quels habíen despertat, que disfrutaren tamé d’ell.
Los familiás que habíen achudat tamé teníen lo seu “platet”, un poc més abundán que los dels vehins.
Estos platets, tan los dels vehins com los de la familia eren de “aná y torná”, perque lo día que matáen ells, fáen lo mateis en natres, mos tornáen lo “platet”, bueno habíen cambiat lo de dintre, que ara ere de un atre gorrino, a eise casi segur que no lo habíen batechat y no se diríe Chum.
Lo mondongo teníe distribuit l’añ pa consumil, se estiráe tot lo que se podíe, teníe que durá de un añ p’al atre, al pronte se mincháen les tallades, los solomillos, los callos, les burrifaldes gordes; un poc més tart les burrifaldes primes, les butifarres; llugo los chorisos y les llonganises secs y si fáe falta alguna espala.
Cuan arriváe lo estiu ere cuan més se consumíe, se mincháen trosos de magra dels pernils, chorisos, llonganises y les tenalletes; fáen falta bones minchades en tantes hores de trevall y de un trevall tan dur.
Aso no ere inconvenien pa que si un día de cualquier atra época del añ ere nesesari, o si ñabíe forastés, traure un poc de lo que estáe guardat pa la sega y la trilla.
Pal inviarn ya sol quedáen sobres, si ne quedáen; entonses la nesesidat se tapáe en los torts y les cols. Y la esperansa de que dintre de pocs díes la funsió tornaríe a escomensá, tornaríe a ñaure artistes, invitats, casi sempre los mateis del añ pasat, y sobre tot un gorrino nau, aisó ere lo fundamental.
De totes maneres tos fach enrecordá que del gorrino se aprofitáe tot, hasta los osos y les cones. Tot asó se bullíe en sosa, se faé una pasta, que se disáe a secá, damún de un drap, rodechat de fustes, més tart en un arám se talláe en pastilles, casi iguals. Ya teniem sabó, casi pa tot l’añ.
Ara a mols puestos ya no se escalde lo gorrino, sino que se “sucarre” cremán lo pial en un soplete de butano.
Normalmén, al bullí les burrifaldes se punchen en una agulla de fe calsa, pa que no se reventon. Tamé cuan se van embutín les butifarres, chorisos y llonganises, se punchen en una agulla més fina pa que no quedo aire entre la mescla y lo budell y se puguen secá bé.
Lo llomo y la costella se tallen en trosos, se salen y, an algúns puestos, se adoben un poc; despues se frechíen y se solien guardá en tenalletes o topíns, ara casi tots hu fan en “pots de conserva”, lo envase se umplie y se umplis de oli, casi sempre lo mateis en que se ha frechit. Este olí, según los puestos, sobre tot an aquells que fa mol fret, hasta se cheláe y fae una pasta en les tallades.
A que tos ha fet la boca aigua, quín gust, pos hasta demá.
 


Les burrifaldes:
A casa les faen en seba, an alguns puestos li afechien molla de pa, a uns atres les fáen en arrós. Sen fáen de gordes (currutaques) que se mincháen frechides y ne ñabie de primes que se solíen empleá pa ficales als fesols o inclús pa minchá algún tros en crugo, cuan ya estáen seques.
Pa preparales se ficáe la sang, la seba y lo que cada u afechire a un barreño, se mescláe be y ara se afechíen les espéssies que podíen se sal, sucre, canela, pebre, anis en grans y hasta anis liquid.
Tot asó se anáe afechin poc a poc, hasta trovali lo gust. A camins se ficáe al foc una paelleta menuda, se faé la mescla, sen frechie un poc, se probáe y se li afechíe lo que los pareisie quels faltare, y aisí hasta que quedaé be.
Después se embutíen en los budells grans pa les gordes y en los michans pa les primes, com es normal en un cordell (fil) se lligáen les dos puntes separades. Al foc un calderó gran en aigua bullín, de cantó a cantó de la boca del calderó una caña o dos si eren primetes y allí se anáen penchán los fils de les burrifaldes, que no se tocaren de una al atra, sino se pegáen y fáe falta que los tapare l’aigua. En una agulla de calsa se anáen punchán pa que no se reventaren.
Les butifarres:
Pa este embutit se empleáe lo cap del gorrino, les faldetes, en algún cas los pulmons y algunes coses més, tot ben bullit, se trosecháe en la maquineta de triturá (capoladora). Tot ben mesclat.
A eise barreño se li afechíen espéssies  sobre tot sal y pebre, nau moscada y aus ben batuts. Les espéssies se anáen ficán com a la pasta de les burrifaldes, tenín a la bora una paelleta menuda y ana probán.
Después, tamé igual que les burrifaldes, se posáen a bullí sol dos o tres minuts y tamé se puncháen pero en una agulla més fina pa que no se fare aire y no se reventaren.
Después se pencháen, en claus o en cañes, de les llumeres del grané, que ere un puesto airechat, sec, fresc y hasta un poc oscur, pa que se secaren.
Se solíen gastá avans que los chorisos y les llonganises y normalmén se mincháen crugues.
Les llonganises:
Se solíe posá la carn magra y la papada, se molíe tot y a la mescla la tía li posáe les espéssies com hay esplicat mes abán.
Les espéssies que se solíen utilisá ere pebre blanc y orégano, algúns afechíen vinagre, coñac, timó o alls. Asó ya anáe a gust del consumidó.
Tot ben mesclat y espessiat se dissáe una nit en adobo. Al día siguién se embutíen, ben pretes pa que no entrare aire y perderen, se lligáen les dos puntes en un fil de cotó o en un cordell.
Se pencháen com les butifarres, pero les llonganises teníen que está més tems, dos o tres mesos, después se podíen mincha crugues o frechides, si se frechíen se podíen minchá al momén, per ejemplo en un poc de tomata o guardales a la “tenalleta” y minchales cuan un vullguere o faren falta. Y sino, se guardáen penchades al grané o repost y gastáles cuan apetire crugues o frechides.
Los chorisos:
La carn a mesclá es la mateissa que la de les llonganises, ben molta y ben mesclada. Se posen les espéssies com ham dit a les llonganises.
Les espéssies pebre, sobre tot pebre roch dols y si acas un chorro de ví sec, pot se un Jerez.
La mescla se dise descansá veinticuatre hores. Y al dia siguien se embutís en lo mateis cuidau que les llonganises y se dissen a secá com elles.
Lo tems y lo puesto pa secáls y consumils o guardals, aissí com les possibilidats pa gastals es tot igual que les llonganises.
Penchats dels claus de les llumeres del techo, allí dormirien uns mesos hasta que los arrivare la hora de baissá a la taula y acompañá al pa y al vi, menudo despertí ***
Lo pebre roch es lo que los done lo coló.

La manteca:


Tota la grassa del gorrino se pase per la trituradora y se frechís hasta que se desfasque, después se ficáe en tenalletes y se anáe traén, pa gastála com hu ham esplicat més amún. Lo que sobre de frechí la grasa se sol utilisá pa fe pastes, (¿ensachinades?), boníssimes.

Les espales y los pernils (cuixots):
Primé ña que apretáls bé pa que acabon de tira tota la sang, se fiquen en algún pes damún y se dissen airechá damún de un cañís coranta y vuit hores, después se tapen en sal y sels va donán voltes de cuán en cuan en un pes damún, al cap de uns dies se trauen y se penchen a un puesto ben airechat y fresc pa que se acabon de secá be y pendre lo gust de la sal. Ahí solen está un tems llarc. De la forma de secás, del tems y de la forma y la cantidat de la sal dependrá lo gust de la magra. Y hala! hasta lo estiu.
Esta charrada es, possiblemén, la més aburrida de totes, pero hu tenía que posá sino no me hu hagueren perdonat algunes amigues meues. Damún no hauré posat be alguna mescla y me guañaré algún rapapolvo. Pero que ham de fe “al que escriu y fa pa, de tot li pot pasá”. Y a mi me pasará.
Algún amic me ha dit que a camins pa pelá lo gorrino se li passáen archilagues enseses per tot lo cos, aisó cremáe lo pial y después se rascáe la pell, com han dit més amún.
Un atre que ell, a casa seua, lo aguantáen dos añs y entonses veníe a pesá algo més de dos sens kilos, lo doble de lo que pesáe lo de un añ.
Anem a recuperá als nostres amics que tot este tems han estat callats com si estaren de dol.
Ha passat un mes después de la matansa, l’agüelo li diu al menut:
+Chaic, tindrem que pintá la caseta del gorrino, pal que vingue, que se la trovo llimpia.
-Si no li pareis mal anem a disau pa un atre día, avui tinc modorra.
+Tú portes mols díes de modorra, lo que tens es cariños, pos un día o un atre tindrás que torná a entrá a eisa caseta. Te churo que Chum ya no está allí.
-Val, val, pero un día o un atre, ya u farem.
Y dién aissó, fot lo cam al carré, encara seguís en la roña per dintre. Ya se li pasará, tots ham tingut díes michans y al remat te acostumbres.
Uns dies después, ya no valen escuses, no quede més remei; pinten la caseta, la encalen, la rasquen y la freguen.
Al cap de una semana cuan lo sagal ve de escola, al arribá a la porta, sentís un ruido a la entrada:
*Going, going.
Entre depresa, dise lo portallibres a una cadira y se arrime a la caseta del gorrino, la porta torne a está tancada, dintre algo se mau.
-¿Chum?
Va corrén, se asome a la varana, allí está Chum menudet. Lo mire be y no té la taca a la orella, pero lo animalet li mire en uns ulls que li fan enrecordá a un atre gorrinet un añ avans y Luiset sen enriu; ya ere hora. 
L’agüelo que lo estáe esperán, se li arrime:
+Enguañ, com no venies tú, me hay fiat y cuan hay arribat sol quedáe esta, perque es una gorrina.
-¿Una gorrina? ¿La puc batechá?
+Pos claro home, ¿quín nom li posarás?
-Espero que me u penso.
Diu lo sagal, que ha anat a buscá una mansana, vella, pansida, pa donalu al animalet com fáe en Chum, pel foraét de davall de la porta. Li hu enseñe per allí y la gorrineta que la veu, se arrime y lo hu pille de la ma.
A Luiset, se li ensén la bombilla, veu la mansana y veu a la gorrina.
-Ya hu sé yayo, li diré Mansa, de mansana y perque es mol manseta. ¡Hola Mansa!, soc Luiset, ¿vols sé amiga meua?
Lo bicho de agraimén per la mansana, diu:
*Going, going.
-Miro yayo, me ha contestat que si.
Tame en ésta se farán amics. Una nova amistat entre un crío y un animal escomense, pero …. eisa, …………. ya es un atra historia.



Mondongo, embutits

Mondongo, embutits, güeña
Mondongo, embutits, güeña

FIN.

////


Amics del agüelo "Sebeta" que seguiu la serie del "Mondongo":

Ña algunes coses que vull aclarí.
Pensaba que ere bo fe esta charrada an este tems, perque se arrimen los díes en que estes coses se faén an aquell tems.
Vech que no hay asertat, cada día es menos chen la que se apunte a llichí la charrada. Salvo los amics de sempre y la familia, eisos sempre están ahí.
Segú que la culpa ha segut meua. Algún amic y la familia me han donat algún motivo.
Primé me diuen que les charrades son masa llargues, tenen raó, pero sabeu qué pase: com fáe tan tems que no escribía aquí, ya no me enrecordo cuán duráen les de avans, debíen de sé mes curtes. Entonses yo me ensenego escribín y no sé cuán acabá y los agüelos del atre costat me ensenen a contá coses a la orella y no los puc fe callá.
De haberles fet més curtes estes charrades podíen haber durat dos semanes y me pareisie masa, per aisó hay abusat de vatres y les hay fet tan llargues.
Per un atre costat pareis que a algúns nols ha agradat lo tema que hay triat, están contra la violensia als animals, pero aisó, ya hu hay dit mols camins, es lo que ñabíe an aquells tems, no parlo de ara, perque tampoc sabría cóm hu diu, perque no se cóm se fa.
Me ha donat la sensasió, o hu hay entés mal, que a unes atres amigues nols pareis be que lo "gorrinet" sigue lo protagoniste de esta aventura, que tingue un nom, que tingue amics, que tingue sentimens. Hu sentisco, cuan me vach pensá la charrada me va vindre al cap esta idea, la verdat es que ell es lo protagoniste, cóm fariem lo mondongo sense gorrino, claro lo podíem comprá a la carnisería ya trosechat, pero entonses la aventura perderíe part del argumén.
Sé que son mols fallos, pero tos teniu que enrecordá que encara sol soc un aprendís de escritó.
Y ara ya no puc cambiá, soc aissí y la parella "Sebeta" - Luiset me porten per estos andurrials. Pero no los doneu la culpa an ells, lo únic culpable soc yo.
Bona nit.

memories

http://aguelosebeta.blogspot.com/2017/05/memories.html

Agüelo sebeta, cebeta, seveta, avi, yayo, agüelo, vell


Memoria 1.

- Agüelo?????
+ Zzzzzzzzzzz.
- ¡Agüelo!!!!!!
+ Zzzzzzzzz
- ¡¡¡¡¡¡¡AGÜELO!!!!!!!!!!

+ Qué? Qué pase? Agón es lo foc? No cridos que t’hay sentit al primé camí.

- Qué me va a sentí, si estae mes traspost ……

+ Aixó es lo que a tú te pareix; la verdat es que estic un poc sort….

- Sort, com una tápia.

+ Tampoc es tan, encara que no te u cregues yo u escolto tot, pero sol séntigo lo que me done la gana, que ya ting mols añs.

- Ham acabat de diná. Se ha sentat a veure (vore) la tele y al momén ya estabe roncán.

+ Que no, que sol tenía los ulls tancats, pero no dormía, sol estaba ensomián mentres pensaba.

- Pensán vusté?, qué cosa mes rara, qué ha passat pa que hasque ocurrit eixe miracle.

+ Una cosa mol curiosa, m’ hay posat a veure lo parte (així al original) y hay sentit que parlaben de La Memoria Histérica.

- Histórica, agüelo, Histórica….

+ Pos aixó es lo que yo hay dit Histérica. Ya saps que yo sol parlo lo chapurriau y lo castellá apenes lo entenc.

A voltes al Sebeta ña que dixal per impossible.

- Bé, es igual, y qué passe en eixa memoria, qué es lo que li ha fet tancá los ulls?

+ Mira, Luiset, ya sé que yo no vach está a la guiarra, que sol vach patí les seues consecuánsies, pero en tota la meva (meua) vida hay anat parlán en chen que sí va está y no sol aixó, sino que tamé la van sufrí y ells me van contá cosetes.

- Home, yayo, aixó no me u habíe dit mai, yo pensaba que no teníe secrets en mí.

+ Ningú mos va di res, pero lo coneiximén de TOT lo poble (mira que tot u hay posat en mayúscules) va fé que, en cuan se va apagá lo ruido dels cañóns, encara que la professó anare per dintre, no parlá mai mes de aquells maldits tres añs. Y yo u hay respetat. Es una promesa, sense fela ni firmala, que van fe los dels dos costats y ya hay parlat massa.

- Seguisque, seguisque……(seguixque a Beseit).

+ Mira, sagalet, que no m’engañes, que tú lo que vols es que te conta coses.

- Home, es que es una pena que s’en vasque, sense aclarimos lo que vusté sap que va passá.

+ Als meus añs, cuan en tot lo meu cap ya blanqueche l’hivern (iviarn), es mol difíssil sabé lo que m’han contat, lo que m’hay imaginat o lo que m’hay inventat o inclús, tot aixó jun.

- Es igual, vusté conto, que, després, yo ya intentaré aclarim.

+ Es mol gort (gros), que ara que prácticamen ya ne queden pocs dels que van viure la gran troná, la desgrássia de tindre que luchá, matanse pares contra fills, germáns contra germáns, veíns contra veíns, españols contra españols, vinguen uns desserebrats y vullguen torná a ubrí les ferides, desenterrá als morts, torná a fe dos bandos, dos parts de un poble gran. Cuan ya les famílies habíen enterrat als seus morts, encara que no tingueren los seus cossos. 

Habíen conseguit que’l resquemó de la vengansa s’haguere adormit, arriben estos y fan tanta bulla, encara que son pocs, que van despertán records y lo pichó es que’ls despiarten en chen que no va está allí. Que sol u coneixen de escoltá o de lligí, en un tems que algunes paraules y alguns llibres no tenen tota la confiansa que teníen que tindre, perque te diré, la obra depén del autó y según de qué piau coixecho lo que parle o lo qu’escriu, aixina es lo seu discurs o lo seu llibre.

M’han fet tindre un boñ (disgust) dintre de mí, que no te u pots imaginá (imachiná). Es la nostra historia, per lo que parlá de aixó no mos té que doná po, tampoc vergoña, no es pa que ningú vingue a presumí de res. Es veure un momén lo que va passá, y seguidamén, olvidau ya de un puñetero camí, completamén. Pa que mai mes torno a passá.

No voldría que estes charrades megües faren nafra (ñafra, taca que se fa a la fruta cuan se li done un golpe) en la paret, mol menos en tota la colla de seguidós que ting, pero no vull dixá passá la oportunidat de contá lo que sé, sense la influánsia de ningú. No m’han obligat a parlá, bueno tú un poquetet sí, pero tu eres de casa. Tampoc me u han prohibit. Hay segut yo sol que s’ha posat an este negossi. Desicho que, cuan acaba de charrá, tots esteu mes tranquils, mes conformats en la historia, pero al mateix temps un poc tremolán y si fa falta defenén que aixó no torno a passá, per molta Memoria Histérica que se fico en camí.

Tamé vull que sápies que escribín estes charrades, encá que en algún momén me fasquen plorá en llágrimes de verdat, al mateix tems, me fará descansá y, cuan tinga que anamen al atre costat, lo sac de la vida que tots portem a la esquena, cuan naixem y cuan morim, sigue menos pesat p’al meu cor.

- Jolines, qué serio se está posán vusté, anem a dixau está.
+ Ara no vull, m’has calentat, pos aguantat. Te vull aclarí que yo no soc, ni vull sé, de cap bando, perque los dos van fé barbaridats, ningú va sé bo completamén, ni a lo pichó tan ruin com mos creem, o mos volen fe creure.
- Sap que li dic, que lo vech mol alterat, anem a dixau per avui, un atre día seguirem, no li vasque a doná algún mal per culpa megüa.


Memoria 2.


- Bon día, agüelo, cóm anem avui?
+ Bon día, Luiset, qué estás maquinán?
- Es que miro, ha dixat als amics de la paret en la goleta de sabé mes coses de les que té vusté guardaes an eixe cap-blanc (capblanc ere un dels motes del Sebeta cuan vivíe al seu poble).
+ Mira, no me parlos en doble sentit que te coneixco, que hay segut flare abáns que cuiné.
- Se diu al revés, cuiné abáns que flare.
+ Tu fesme cas a mí que sempre sé lo que dic y lo que vull di.
Ña que aclarí que l’ agüelo, de menut, va estudiá al seminari, inclús digüen que va arribá a du sotana. Aunque ell de aixó no parle.

- Sap que tenim una conversassió a mijes. Que ña molta chen que li seguís y están impassiéns pa que’ls conto aventures de la memoria.
+ Y qué te pareix que venim fen desde que han escomensat a emborroná esta paret. Mira te contaré coses si me prometisses que se quedarán entre natres, que no se emplearán pa res mes, que no eixirán de la aldea de Chapurriau.

- Aixó no fa falta diu, la chen es seria y respete la forma de pensá de cada u. Lo que mos unís es lo treball pa guardá lo nostre parlá , després (después) de aixó, allá cada cual (cadaú).

+ Ya te hay dit que, com soc yo lo que u conto, vach a fe lo que me dono la gana y mai sabrás si lo que diga va passá de verdat o me u hay inventat. Si va passá aissina o de un atra manera. Pa que ningú trague consecuénsies ni resquemos. De momén me vach a inventa lo nom dels dos bandos, a uns los diré blaus y als atres colorats. Y tamé pa que ningú se cregue que me referisco al seu poble, m’en inventaré un que li direm L’Aldea, provínsia de Teruel, perque es la megüa.

- Si que escomensem be, així no ñaurá qui se aclarisque.

+ Es igual que escomensem per uns o pels atres. Ademés si uns van escomensá, los atres van seguí.

Te diré que L’Aldea va está uns camíns en mans dels colorats y uns atres dels blaus, Tothom que entrae al poble, lo primé que fae ere aná al ajuntamén y reclutá als jóvens que anabem quedán, aissina, quinta a quinta, al final los colorats se van emportá hasta críos de 18 añs. Assó no vol di res, perque segú que’ls blaus se acababen de endú als de 19.

Encara te u diré un camí mes, assó es serio, mol serio, mes de lo que tú te imagines. Sol u fach perque tamé esta part de la nostra vida es historia. Pero sol pa recordarla, no revíurela. Y pa que mos servisque de llissó y no u fem mai mes.
- Ala, que s’enrolle como una persiana, escomenso de un camí.
+ Pos, mira no vull, tindrás que esperat pa un atre día, que les coses importantes, com les nóvies guapes, sempre se fan esperá.



Memoria 3.

+ Cuan los colorats van di que habíen guañat les elecsións, en un aubrí y tancá de ulls se van fe los amos de L’Aldea.

Van aná a la iglesia, y a la portalada, ya van fe la primera malesa, en pics, estrals y mes ferramentes van tirá totes les estátues de sans que van podé. A les que estaben ben agarrades les van tallá lo cap, les mans, lo que sobreixíe del cos, hasta que se van cansá. Després van entrá dintre y del altá y la sacristía van traure a la plassa, les vestimentes del retó y mes estátues. Les tiraben antiarra, les partíen en les estrals…. S’enrieben dabán de la chen, dieben mireu al vostre deu, als vostres sans, aquí sol ña fusta querá (en carcoma), o escayola en pintura per defora. Cuan ya teníen un mun, li van prende (prendre, pendre) foc, reinse (enriense) de la chen díen mireu lo vostre sial es un infiarn y ningú se salve, lo mateix passará en tots los que no mos obedisquen.

A la chen de La Aldea li van demaná que portaren totes les joyes que tingueren de sans, cristos o marededeus, pa fundiles y fe dinés p’als pobres del poble, aunque alguna s’en va piarde per la borxaca de mes de un. Al mateix temps, los amenassaen diénlos que si després, regiraben les cases y trobaen algún relicari o símbol religiós mes, an eixe l’afussilaríen inmediatamén. 

Tota la chen los va fe cas y van portá creus, escapularis, medalles y demés relicaris. Algún valén diebe després que ell no habíe portat mes que una señal y lo demés u habíe amagat daball del fem de la mula.

Entre los mes exaltats, ñabíe un chic jove, que habíe segut monaguillo mols camíns y se sabíe lo Confiteor deo de carrerilla. A les professóns de Semana Santa eixíe vestit de romá, mes pito que ningú, pareixíe lo general de tots los atres románs. Li direm Manuel.

Bueno, pues este, va traure una pistola, ningú sabíe de agón, se la va posa dins de la correcha y anabe fen po als demés Aldeáns.
Se van presentá a casa del retó (mosen) pa detindrel, pero la segua família se habíe enterat de lo que passabe y l’habíe amagat, diénlos que s’en había anat de L’Aldea..

Mentres tan, algú del poble, sempre ha ñagut la duda de quí va se, habíe fet una llista dels mes rics, dels mes religiosos, dels mes amics dels blaus. De eixa llista van fe una criba (selección), van elegí als mes importáns que no se habíen amagat o escapat del poble, y van vindre un grup de chen desconeguda que portabe fussils y los van aná a busca a les seues cases y los portaen al ajuntamén.

Ere costum en aquells moméns que los mes revoltosos de un poble anaren al atre a fe llimpiesa, y al revés, los mes significats de éste anaben al atre a fe lo mateix. Aunque la informassió la donaben los del poble, eren los del atre poble, los que faen la faena. Y aixina va passá tamé a L’Aldea.

Aquella nit ningú va podé dormí al poble. De matinada se van sentí, llun, com uns focs artifissials. Per de matí un pastó va arriba corren al poble: a la cuneta de la entrada al terme, ñabíe un grupo de persones que pareixíen mortes, totes ensangrentaes.

Los familiás dels que habíen pres lo día de abáns, tots plorosos, van aná corren allí pensán que serien los seus paréns, van emportás machos y mules pa podé replegá als morts.

Cuan, sense aliento, van arribá agon habíe passat la tragedia, va resultá que ningú coneixíe a aquella chen, no eren los seus paréns. No eren de L’Aldea. La esperansa va torná a les seues cares.

Pero l’alegría dure mol poquet a casa del pobre, al ratet va vindre un afiladó que anabe de poble en poble en la seua burreta y los va contá que al atre poble, qu’estabe ajuntán en L’Aldea, a una cuneta, tamé habíen aparegut un grapat de chen, com aquell, morts y ensangrentats.

Sense sang al cos, ni aire als pulmons, van aná corren agon diebe l’afiladó y allí sí, allí estabe los Aldeáns, morts, ensangrentats, chuns. Tots van replegá als seus paréns, los van carregá als machos, y com si fore un entiarro, mol llarc, sense retó, pero en mols machos carregats, los van portá cap al poble.

Los morts estaben a la vora de un barranc. Habíe passat que uns fills no van trobá al seu pare, lo van buscá per tota la redolada, barrang abaix y res. Ne faltabe un, a sabé perqué, no lo van trova, van torná a casa tots preocupats, ¿qué li hauríe passat?. Pero no van di res a ningú, per si acás.

Los forastés dels fussils van desapareixe. Y dels revoltosos del poble ningú sabíe o volíe sabé res.

- Agüelo aixó que me conte es mol fort…. Su ha inventat, les persones no poden sé tan ruines, matá per la forma de pensá, o per tindre unes pessetes mes que’ls atres.

+ Uyyyy y per menos. Pero lo pichó es que no mu hay inventat. Ojalá fore aixina, - va di l’agüelo -, en tota la sorna del món.

- No se poso aixina, home, es que se me ha ficat la pell de gallina.


+ Pos sol hay escomensat…….Si me seguisses escoltán, se te posará de pepino (cogombro).



Memoria 4.

- Sebeta: ¿Ya se li ha passat lo boñ (enfado)? Es que me va pareixe mol fort tot lo que me va contá. Va, home, que ya sap que yo l’empreño (le cabreo) de cuan en cuan, pero me crec lo que me conte, encara que siguen barbaridats.

+ Si hagueres segut menut com yo y hagueres vingut en lo coche de línea a L’Aldea, t’hauríes donat conta que, prop de la entrada del poble, abáns del nostre, ña una creu, en una leyenda que te uns noms que fan recordá unes morts de chen de la nostra aldea. A lo milló va passá com yo te vach contá l’atre día.

- Bueno pero eixa charrada sol se referíe als colorats y vusté me va di que podíe repartí p’als dos costas.

+ ¿Per qué, la chen de ara, teniu tanta pressa? Si al final tots arribem agon tenim lo destí (destino). Hau de tindre un poc de passiánsia, encara aixina me se quedarán moltes coses dintre, o sigue que no me encórregues, poquet a poquet, s’arribe llun.

- Val, un camí mes, te raó.
+ Com sempre, Luiset, com sempre.

Tens que tindre en conta que tú vols que en una semana conta aquí lo que va passá en tres añs; home, donam un poc de tems.

Te acabaré de contá lo de ahir, després lo que van fe los blaus, cuan van entrá al poble, lo que va passá a algunes cases, algunes de les troles que van corre per lo poble, y si la memoria m’acompañe…….ya vorem. Tens que tindre en conta que ña mols amics que mos llechisen y a lo milló se farten de natres, o los moleste que parlem de aixó.

- Sebeta, vusté parle y los que volen l’escolten, si algú no está contén en lo que vusté diu, que s’en vasque a un atre corro, o que llechisque a uns atres, que an esta paret n’escriuen mols y alguns mol bons, prau milló que natres.

Ala, que ya m’ha tornat a embolicá, en tantes coses, com se note que va sé flare abáns que cuiné.

+ Menut, no t’en enfotes (enfótegues) que’t dono les surres que no te van doná de menut. Y dixam está ya……

Habíem quedat que entre los morts aldeáns, ne faltabe un.

Ere de nit, los paréns estaben reunits a casa d’ell, rossegán (rumiando, discutiendo, elucubrando) qué hauríe pogut passá. Se fae tart, los familiás s’en van aná. A la casa sol van quedá la dona y los fills de aquell home.

Se van chitá, y seríen les tres o les cuatre del matí, cuan la porta del carré se va oubrí (entonses les portes de casa no se tancaben mai en clau). 

Lo fill mes gran va sentí lo ruido de la porta que se tornabe a tancá y va aná enseguida a ensendre lo cresol (candil), baixán tremolán a  la entrada, pensán que tornaben los revoltosos, pero cual va sé lo seu susto al veure una sombra sentada a una cadira a la vora de la porta, la llum de la mecha no arribabe hasta allí.


Se va arrimá, y allí estabe son pare, com si estare dormín en tot lo cap y tota la roba ensangrentá. Li va tocá lo pols, y aunque mol a poquet , encara ne teníe.

Corren, va despertá a sa mare y a son germá y los va fe baixá a la entrada. Entre los tres van agarrá al home y lo van puchá al llit, lo van despullá y lo van rentá de dal a baix. Teníe una ferida al muscle dret, pero que no pareixíe grave, pos li movíen lo colse y no se queixabe, o sigue que no teníe res chafat.

Després teníe una atra ferida al cap, al pols (pulso, sien) isquiarro, allí ñabíe un foraet com un llidó, per lo que no dixabe de eixí sang, li van posá un drapet llimpio y li van vendá (envená) lo cap.

La seua dona li va prepará un bon caldo y cuan se va despertá li u va doná culleraeta a culleraeta.

Ell va pendre (guañá) un poc de forsa y va fe apagá lo cresol pa que ningú vere lo resplandó desde lo carré, després, poc a poc, los va aná contán...

Cuan mos van apresá, mos van furtá, ademés de la dignidat, lo poc que cadaú portabe damún, mos van portá al ajuntamén, allí ñabíe chen desconeguda que portaen fussils, mos van fe sentá antiarra y van tancá la porta.

Van du unes soguetes (vensills, cordes) y mos van lligá les mans, després una corda de carrechá, (acarrear) la van passá pels nostres brassos, fen un nugo a cada sogueta y allí mos van tindre tot lo día, no mos dixaen ni pixá, o sigue que u faem sentats, pronte aquella entrada fae oló a pixats y a algo mes que algú se habíe fet de la po que teníem.

Mos se van enriure, tratanmos de flares, capitalistes, explotadós, etc, algún mes rencorós mos anae pegán en la culata del fussil.
Cuan se va fe de nit, van aubrí la porta y mos van fe eixí a la plassa, sense rechistá, y de allí, com si fore una corda de pressos, mos van fe baixá per les escaleretes y van escomensá a caminá per la carretera en direcsió al poble de la vora, si algú caíe, perque ere de nit y no hi veíem, li pegaen en los fussils, hasta que se eixecabe; mos ajudabem (achudabem) uns als atres.

Cuan ya eixíem del terme, en direcsió contraria ne veníen uns atres com natres, tamé lligats.

Mos habíen dit que mos portaen al atre poble, y que mos faríen un juissi (chuissi, juicio) y després tornaríem al poble. Pero cuan van veure que passaben de llarc de les cases, ya van pensá mal. Van arribá a un puesto agon lo camí se eixamplíe, a la vora de un barranc, y allí mos van posá als prisioners, mentres que ells se ficaben al atre costat, van prepará los fussils y sense dimos res van escomensá a dispará.

Yo vach sentí un golpe (cop) al muscle que me va fe caure a entiarra, al mateix tems la atra chen tamé caíe, algún damún de mí. Cuan se va acabá lo soroll (ruido) dels tiros y ya ningú se movíe, lo que pareixíe lo jefe va traure una pistola de la sintura y mos va pegá un tiro al cap a cadaú. Vach (pedre) piarde lo sentit.

No sé cuán rato habíe passat, me vach despertá tot atontat, sense sabé agón estaba, pero al veure als atres tirats antiarra, ya me vach doná conta de tot. Los mol perilláns, mos habíen llevat les soguetes y la corda de carrechá.

Debíe habé passat poquet rato perque ningú se habíe arrimat allí.
Com vach pugué, me vach eixecá y al voldre maurem, a tamborilades (entropessóns) vach caure pel barranc y vach escomensá a caminá cap al poble, cuan trovaba alguna basseta bebía aigua.

No sé cuantes hores hay tardat en arribá, pero escomensabe a fes de nit. M’hay amagat a la caseta del hort y cuan ya no podía mes hay vingut a casa.

A la matinada siguién, lo chic mes gran, va agarrá la mula en una sária y los va di als veíns que s’en anabe a buscá a son pare atre camí, a ver sil trovabe. Als cornalóns portabe un talegó ple de tiarra y una borrassa plena de sang de un cunill que habíen matat per la nit.

Per la tarde va torná en la borrassa envoltán al talegó, dién que habíe trobat lo cos de son pare al fondo del barranc, mich desfet per la caiguda y pels buitres y los llops que habíen escomensat a minchás los trossos. Ningú lo va voldre veure.

Com no ñabíe retó, y la iglesia estabe tancada, lo van plorá eixa nit, a casa, a la entrada (pati), posat dintre de un ataút tancat y al matí siguién, tots plorosos lo van portá al fossá (sementeri), van fe una fossa a la tiarra y lo van enterrá. La dona, tota vestida de negre, se desfae en plos, los fills la consolaben com podíen.

Mentres tan, a casa, dins del trull (trujal) de mes a dins, en un colchó de peladures de panolles (márfega, colchón de mazorcas de maíz), en uns llansols y unes mantes per damún, un orinal (bassí) y una pichella de aigua, un home acababe de naixe atre camí. 

Com lo puesto ere menut, apenes podíe está dret y la fredó y la humitat li entraen mol a dintre y desde entonses, mol asobín se li ressentíen los ginolls (chinolls) y los turmells, sobretot cuan s’arrimabe troná.

Damún del trull del racó, ñabíe uns sacs de llaó, que en mols mesos, tindríen que maure cada nit, pa que lo ressién nascut puguere seguí vivín la segunda oportunidat; y les ferides del cos anaren tancanse; les atres no se tancaríen mai. Cuan ere de nit, com un fantasma, pasechabe per tota la casa a escurines (oscurines).

- Uffff, agüelo, assó sí que es una aventura.

+ Luiset: qué mes voldría yo que assó fore una aventura y que totes passaren igual, que acabaren be, pero no pot sé, com te contaré un atre día. Y ademés enrecordat dels atres que no van tindre tanta sort, que no van podé torná caminán per lo seu peu, que’ls van tindre que portá los seus paréns, perque ells ya mai mes podríen caminá hasta L’Aldea.


NOTA DEL AUTÓ:

Aunque mes en daban se explicará lo que va passá, vull aclarí que ha ñagut camíns en que bales disparaes per pistoles del 6’35 o del 7’65 e inclús del 9 curt, perque los cartuchos eren vells o perque la pólvora estabe mal, o ñabíe poca, sol han entrat un poquet al cos y s’han quedat entre la pell (pial), que ha aturat la poca velosidat que portabe, y la carn. En este cas lo plom va penetrá la pell y l’os y si estae en mal estat, al no tindre forsa, se va quedá entre l’ os y lo servell. (Possiblemén la pistola utilisada fore una de eixes que s’han nomenat mes amún.)



Memoria 5.

- Bon día yayo.
+ Bon día sagal.

- Que dic yo, que eixes coses que me conte no han pogut passá, que se les invente.

+ Pero bueno, a tú qué te enseñen a l’escola, no se pa qué aneu, si no depreneu per lo menos un poc de educassió. Ña que respetá a les persones majós (machós), encá que sol sigue per aixó blanc que ting al cap. Ya te vach di que algunes han passat a L’Aldea,  atres a uns atres pobles, y alguna, mol poquetes, me les imagino (imachino) o me les invento y podríen habé passat.

- Val, val, te raó.
+ Com sempre, menut, com sempre.
- No cambiará mai.
+ Al meus añs ya no se cambie, com no sigue pa pichó.
Anem a posamos serios, estat quiet, dixa de doná voltes, sinó no puc fe bona memoria…...

T’enrecordes que al retó de L’Aldea, la seua família l’habíe amagat. Teníen una falsa, damún de la casa y allí, daball del tellat, estabe lo pobre home, li donaben lo minchá una volta al día y no se atrevíe a eixí de allí pa res.

Cuan van chafá los sans de la iglesia, se va aguantá, en mol doló, pero se va aguantá. Pero cuan li van dí que habíen matat a los Aldeáns, alguns perque anaben a missa los domenches, ya no va podé aguantás mes, va baixá de la falsa, se va posá la sotana y agarrán les claus de la iglesia, encara que sa germana (chermana) y sa cuñada van intentá detindrel no u van conseguí, tanta forsa interió teníe. Los diebe que habíe fallat als morts, que ell teníe que habé estat a la seua vora y morí en ells.

Va eixí al carré y mol sereno s’en va aná directamén a la iglesia, la chen cuan lo veie passá, alguns se señaben (santiguaben), uns atres parlaben per debaix, algúns chiraben lo cap de vergoña y no va faltá qui va aná a donals avís als revoltosos que estaben al ajuntamén.

Va aubrí la porta mich cremada, va puchá al campanal y va escomensá a tocá les campanes, dos tocs de la gran, un toc de la menudeta, (dong, dong, ding) dos tocs de la gran, un toc de la menudeta (dong, dong, ding) y així seguit, a poquetet, sense pressa, ell ya habíe arribat al seu destino, y si tocabe ere per los Aldeáns morts.

A L’Aldea ñabíe una costum en la forma de tocá les campanes que tot lo món u enteníe.  Ñabíe lo toc dels morts, com acabam de diu, dos tocs de la campana gran, un de la campana menuda. A foc (cuan se cremae una casa, una pallissa o una finca), sol la campana gran en tocs mol seguits, com si vullguere dils als veíns que ñabíe pressa, cuan se sentíe esta forma de tocá tots, dixaben lo que estaben fen y acudíen corrén a la plassa, portán galletes (cubos) p’al aigua. 
A missa, se tocabe vin camíns sol la campana gran y después de un poquetet, un toc, dos o tres, según que fuere lo primé, lo segón o lo tersé avís de que anabe a escomensá la missa. A festes, entonses se doblaben (vandechaben) les tres campanes que ñabíe, la gran, la michana y la menuda, així s’els diebe. 

Semana santa, los díes en los que Deu, nostre siñó, estabe mort, se tocabe lo torn, que ere com una matraca mol gran, que al fela dona voltes, les masses giraben (chiraben) golpeján (golpechán) la fusta del torn y faen que eixe ruido, desde lo alt del campanal, se sentire per tot lo poble.

Cuan los revoltosos van arribá a dal del campanal van trobá al retó sentat, en una corda a cada má, y al seus estiróns los badalls (badajos) de la gran y la menuda, seguíen tocán a morts, dong, dong, ding; dong, dong, ding. 

Lo primé que van fé va se llevali les cordes de les mans, pa que se acabaren les campanades que tot lo poble estae escoltán.
Entre los revoltosos, estabe lo romá (romano de Semana Santa), que habíe segut monaguillo (escolanet). Va sé ell lo que li va dí al retó, móssen: mos te que acompañá.

"Claro Manuel, tantas veces que me has acompañado tú, ¿Cómo no te voy a acompañar yo ahora?"

Lo van du al ajuntamén, li van fe llevás la sotana, pos los fae un poc de respiacte. Devall portae uns pantalóns y una camisa com cualquier home. Después li van lligá les mans y lo van ficá al calabós.

A la nit, li van fe pillá un pic y una pala y s’el van emportá. Ere una nit estrellada, la lluna repartíe la llum del sol per aquella prossesó que, com sempre, portabe al retó lo primé, los atres cuatre, anaben detrás,  en los caps, cachos. Les sombres los acompañaben y al camí se reflejabe la figura de un home portán als muscles una creu formada per lo pic a un costat y la pala al atre.

Llun del poble, a un campo, a la vora de una cuneta, qué manía teníe esta chen en les cunetes, allí lo van fe baixá al bancal y li van fe cavá una fossa en lo pic y la pala, les mans plenes de bambolles (ampollas).  

Lo Manuel, possiblemén per vergoña, no estabe. Lo que pareixíe lo jefe, portae un cabás (capazo), en dos sacs. Un dels sacs pareixíe que se movíe.

Lo van fe despullá. A la oscuridat iluminabe la clara llum de la lluna. Se va veure una má que se eixecabe, en direcsió als cuatre hómens que’l estaen mirán, y baixabe, al mateix tems que una veu clara anabe dién: 
Ego te absolvo a peccatis tuis….

Després li van doná un sac gran, pareixíe un talegó (una talega, taleca) y li van di que se ficare dintre ... in nomine Patris, et Filii et Spiritus Sancti ... 

Cuan ya estabe dintre van puchá la boca del sac per damún del seu cap. Van agarrá l’ atre sac, que ara sí que se movíe y lo van vuidá dintre del primé, se van veure caure dos bultos oscurs que se movíen, rápidamen van tancá lo sac, lliganlo en un cordell. Encara se va sentí ... Amen.

Van tirá lo sac dintre de la fossa y van escomensá, corrén, en molta pressa, a tirá palaes de tiarra damún. Sol se sentíen uns marramiaus y se veíen dos bultos movense abán y atrás al talegó, del home no se sentíe res y mai se va sabre res mes d’ell.

Ere un bon home, y haguere tingut lo deu que haguere tingut, haguere segut un bon home.

- Ostres, Sebeta, casi me fa plorá.
+ Avui no estic pa res.

L’agüelo Sebeta pareixíe que tragare mal, com si tinguere un nugo a la gola.



Memoria 6.

- Venga agüelo, nem a passechá y me conte mes coses, que lo de ahir ya s’ha passat.
+ Díxam está que avui estic cansat.
- Va, home, ya’l duré yo ancostes (a corderetes, a colleres, a la esquena, a cascarrulles).
+ No t’enfótegues tan que encá que u fas a amagatóns, yo m’en dono conta, que eres un garramós (trampós).
- Que mala idea té, si yo u fach en tota la bona intensió.
+ Que no m’engañes sagal, que te conesco, fa mols añs y ya saps que’l diable saps mes per vell que per diable. Y yo sempre ting raó, sempre.
- Val, pa vusté la perra gorda.
+ Com abuses de que ting bon cor……..

A L’Aldea ñabíe molta chen, bona y menos bona, per aixó, en los moméns que estem pasan, se demostrae, milló que mai, de qué peu coisechabe cada un.

Ñabíe una chica, de uns 19 añs, que cuan los revoltosos se van fe los amos de La Aldea, cuan eixíen per lo poble, ella anabe daban en lo puñ isquiarro eixecat, sempre per abán. Enriense de la chen que pensabe que no ere del seu bando. Y si veníe algún forasté, amic dels revoltosos, allí que estabe ella en lo puñ isquiarro eixecat.

Se va fe una comuna (comunidad), en la que los cams, los horts, les ferramentes, eren de tots. Cada u, va portá les ferramentes que teníe a casa, pa treballa. Unes atres se van comprá noves a la tenda, en los dinés que se van fé, venen les joyes religioses (relichioses) y les dels rics que se van intervindre. Al escomensá y acabá lo trevall, se contaen les ferramentes.

Bueno pos sempre ña algún espabilat. Va ñaure un que al acabá de treballá va pillá una eissada noveta, en la escusa de ficala en remulla pa que’l mánec se quedaré mes segur y no ballare, lo que no dixabe treballá be. Al matí siguién va arribá lo primé y va dixá la eixada al mun, de tal manera que cuan van contá, estaen totes les ferramentes. Lo que ningú se va dona conta es que el perillán, no direm si ere dels blaus o dels colorats, se habíe endut una eixada nova y ne va torná una esportillada que teníe vella a casa.

De cuan en cuan los revoltosos faen requises per les cases, pa comprobá que se cumplíe lo qu’ells manaben y de pas s’emportaen lo que creíen que’ls sobrabe als Aldeáns y fae falta a la comuna.

Un día van entra a la casa de la tía A y li van veure uns topíns que estaen com naus, encara que un teníe una nafreta que casi no se veíe, y sels van endú, p’al minchadó comunal.

Al poc tems la tía A va aná a visitá a la tía B, dona (esposa) de un dels que portaben la comuna (tampoc aquí diem lo bando del que ere esta persona). La tía B estabe al llit (cama), pos no se trovabe bé, lo seu home li estabe preparan una mansanilla y teníe lo topí al foc y lo van crida a la porta, per lo que va tindre que baixa al carré y la tía A va aná a prepará la tisana y allí se va emportá una sorpresa perque li va pareixe que’ls topíns que estaben a la vora del foc eren los d’ella y al mira lo menudet allí estabe la mateisa nafra que teníe el seu.

Cuan ya la guiarra, estabe en marcha, la chen de L’Aldea va tindre que dissá les cases y marchá a unes coves del monte; a cada forat, sen amagaben (escondían) tres o cuatre famílies (bueno prácticamen les dones y los chiquets, perque los homens estaben luchán y morín al front. Allí habíen portat, totes les coses que teníen un poc de való y les de minchá.

Pos be, sempre que li tocabe prepará lo diná a la tía A, la tía B, li diebe trau, trau de la tenalleta (tinalla minuda). Allí estabe lo poc adobo que’ls quedae.
Cuan ere al ravés, la tía B preparabe un rabec (rábano) en pataques y prau.
Tampoc aquí direm a qué bando perteneixíen la tía A y la tía B.
- Qué perilláns eren les chens de L’Aldea, je je..
+ Sí y yo sé quí u ha heredat, lo ting a la meua vora.
- En aixó no te cap de raó.
+ Yo sempre ting raó, Luiset, sempre.

Y l’agüelo Sebeta va escomensá a feli cusigañes (gochet, pessiguañes, etc) a Luiset, pa que no s’enfadare.



Memoria 7.

+ A ver, menut, avui no me preguntos res, que este tema de la Memoria Histérica se está fen mol llarc y me falten algunes coses que contá encara.
- A mí, com vusté mano, ya que es vusté lo que dispose..
+ Encara estas enfadat eh?
- Que no….
+ Que’l agüelo sempre te raó, sempre…..

Ñabíe a La Aldea una família que li direm, la família T, que, a mitat de la guiarra encá teníe a casa dos chics, mossos, de 22 y 18 añs.

Los revoltosos van agarrá al de 22 añs y lo van posá, an ell sol, al campanal, pa que tocare les campanes si veíe vindre als avións enemics, per algún dels cuatre costats.

Va puchá a dal del tot y va escomensá a mirá a lo llun, per les cuatre finestres, per aquí res, per aquí tampoc, no res, y no res. Y a torná a escomensá. Al poc rato ya estabe cansat y casi marechat de doná tantes voltes. Se va entretindre un ratet mirán los coloms per damún dels tellats.

De cuan en cuan mirabe per les finestres. Aquí no res, allí un esparvé y res y res. A torná a escomensá, aquí no res, allí, ahí va no ere un esparvé, pareix una bandá de buitres, res y res.
De pronte un ruido atronadó, mire de agón ve; de la segunda finestra, corre allí y lo que li habíen paregut buitres, resulte que eren avións, que ya estaben damún. Com un boch (loco) se tire a la campana gran, agarre lo badall y escomense a tocá.

Los aviadós se donen cuenta y disparen contra lo campanal, en tan mala sort que un tiro li pegue al ull isquiarro y cau al piso sangrán per la cara. Aixó li va salvá, perque al está abaix, los disparos del segundo avión que van entrá en tota la forsa, no li van alcansá.
Com pot baisse totes les escales, y ne son moltes, y note una cosa, té la cara bañada de sang y en l’ull ferit no veu res.

Cuan s’en van los avións y pot eixí de la iglesia, sen va corrén a casa. Sa mare, al veurel arribá tot ple de sang se preocupe y lo porte corrén a casa del dotó. Allí li donen la notíssia, lo chic ha perdut l’ull, pero ha guañat la vida, perque sol ha segut una esquirla de pedra. Si haguere segut una bala, ara estaríe mort.

L’atre germá (chermá), de casi 18 añs, es un sagal rubio que, a causa de la edat, hasta ara se ha lliurat de aná al fron. Li encante cassá, te una gosseta que li diuen canela que es mol bona traén y agarrán conills e inclús alguna perdiu que atra. Lo rubio pare rateres, hasta pa casá jabalíns. Ah, ña una chica del poble que li agrade y pareix que ella no li es indiferenta.

Pero cuan la desgrássia arribe a una casa, arribe a cabassos. Als pocs díes los colorats arriben al poble y s’emporten al rubio, diuen que’l partit lo nessessite. Li donen un fussil y caminan, caminan ixen capa Teruel, es agon fa falta chen ara. Pel camí intenten enseñali cóm funsione lo fussil, pero ell es tan chove que no se entere.

Arriben a Teruel, en tot lo fret del món, y damún portán albarques (abarcas). No’ls habíen donat ni espardeñes. De momén están parats, pero un día li diuen que ña que eixí en tota pressa, agarra lo fussil y corre, cap aquells montes, ña que recuperá aquella vall. Al seu costat va lo negre, per lo coló del  pial, són del mateix poble y amics, com tenen los mateixos añs, los han reclutat junts. Aissó (aixó) los ha achudat a soportá un poc milló lo fret y la falta de son; lo parlá los dos juns y ademés en chapurriau que es la seua forma de parlá.
Van caminán los dos juns, y de pronte una troná, que hasta fa saltá la tiarra. Pero qué pase, qué es aixó, no plau aigua, sol una polseguina que no dixe veure res.

Corren los dos com si foren les carreres de les festes del poble y vullgueren agarrá al pollastre pa dul a casa y pode minchá.
Pero, de repén, lo rubio se pare, no té lo fussil, li falte la ma isquiarra, del bras li chorre la sang, per la má dreta tamé ne té y per lo chinoll isquiarro, cau antiarra, un obús l’ ha matat. Lo negre lo cride y no li conteste, pero ell té que seguí corrén, está plovén metralla per tots los costats.

Lo negre s'ha salvat, y escriu una carta, plorán, a sa mare, li conte lo que li ha passat al rubio, la forma que ha tengut de morí, pero pensé que no ha sufrit (patit) massa, perque l’obús li ha pillat de ple.

La mare del negre va corrén a casa de T. La mare, en cuan la veu arribá y li veu la cara, escomense a tremolá y a plorá. S’abrassen les dos. Llechisen la carta un camí, un atre, un atre,…  pero per mes camíns que la llechisen, lo que está escrit no cambie, sempre diu lo matéis, lo rubio ha mort.

La canela, pareix que se u pensé tamé, se torne triste, dixe de minchá y en eixe sexto sentit que tenen los animals, cuan per lo cap de la costa escomensen a baixá los soldats en la ma dreta, ubiarta y estirán lo bras cap a mun, canela arranque cap an ells gañín (ladrando) com mai, en la boca ubiarta, caenli la saliva, enseñán los colmells (colmillos). Al carré se sentís una descárrega de fussil, la canela cau seca. Miranla als ulls diríem que descanse.

A la entrada dels blaus, després de passá contes en los blaus y en los colorats, lo capellá del regimén (rechimén) se avé a fé un funeral per lo rubio, encara que, al prinsipi, fique alguns reparos, perque si va morí anán en los colorats, es difíssil que vasque al sel (sial), en totes les maleses que han fet.

Al cabo dels mesos a la estassió del tren de L’Aldea, arribe un tren, se pare. D’ell baixe un chove mol vell, li falte la ma isquiarra, en la dreta aguante una muleta, coixeche de la garra isquierra, apenes li quede pial al cap.

La tía T, tota vestida de negre, portán un gran mocadó al cap, está agranán lo carré, algú baixe per la costa, será un soldat perdut, demanán un poc de pá, ademes lo pobre pareix vell, está coixo y li falte una ma.
Lo seu cor se pare, sentís una veu….Mare,…..Mare…soc yo.
La tía T tire la granera y escomense a corre, s’abrasse al chove que te lo pial rubio.
Fillet, pero que te han fet?
– Mare, …  la maneta.
No pase res fill, ara estas a casa, no ploros, mos arreglarem……
Los dos ploran juns, entren a casa.
Lo rubio, mai mes va  torná a se lo mateix, sempre va se vell.
Sense la canela, sense podé aná a casá, sense la ma, ya no podríe pará les rateres.
La chica que li agradabe, al pensá que habíe mort, s’en va aná a Fransa en la seua família.
Desde eixe mateix momén, lo rubio, per los seus motius familiás y personals, va elegí com la seua compañera a la soledat. Y encá que tinguere chen al seu costat, lo rubio sempre va está solet.
Y lo rubio sempre va se un desgrassiat, hasta lo mateix momén de la mort, sol, a una habitassió sense llum, en la finestra y la porta tancaes, la persiana baissada, la llum apagada, casi siego, y sense ningú al seu costat. Sol y desgrassiat.
No deu ñaure Deu, cuan permitís que passon estes coses .
A camíns miro lo sial blau de L’Aldea y entre los núgols blancs, me pareix veure al Rubio cassán en la canela. Ell s’enriu y ella gañís d’alegría. Ya están junts. Han passat mol tems de peniténsia y se u han guañat.
Los morts al final tenen pau.


Memoria 8.


Cuan los blaus van entrá a L’Aldea, los seus amics van escomensá a respirá.

Los colorats al sabé que se estaen arrimán, van agarrá los papés que van podé y sels van emportá, los demés los van cremá. Alguns van marchá a Fransa, uns atres van tirá cap Barselona, alguns se van quedá al poble, perque pensaben que no habíen fet cap mal.

Van entrá pels carrés (calles) en los fussils apuntan a tot lo món, la poca chen que encara estabe al poble eixíe al carré, alguns eixecaben la má dreta en un saludo temerós com lo faen los soldats.


Cuan se van enterá, los qu’estaben a les coves van torná al poble, en molta pó.


Perque, cuan manaen (mandaban) los colorats, algún camí se vestíen com los soldats dels blaus y entraben pel poble o se presentaen a les cases, com si foren blaus, saludan com ells, en la má dreta alta, si algú los contestabe, pensaen que ere un traidó o un amic d’ells y lo faen pres. A mes de un, que, al veurels vestits así, habíe demostrat alegría y habíe parlat massa, li va costá la vida.

Los blaus, als pobles que manaen ells, faen la mateixa garrama (trampa). Los dos eren iguals. Los uns despreníen dels atres, pero sol les coses ruines (dolentes, malas).

Los soldats, un camí que van comprobá que al poble, no ñabíe enemics armats, se van reuní en los seus amics. Algú d’ells los va fe una llista dels colorats mes importáns que encara quedaben al poble y en ella van afexí (afechí) alguna persona mes a la que li teníen manía.


Ña una cosa que, encara que es mol forta (que’ls menuts no u lechisquen) tos ting que contá. Tos (ton) enrecordeu de aquella chica, amiga dels colorats, que’ls acompañabe cuan anaben pels carrés. Bueno, pues algú los u va contá als blaus. La van aná a busca, pos estabe amagada a la seua (segua) casa, la van portá al ajuntamén, la van despullá (la desnudaron), li van posá una granera al muscle isquiarro, com si portare un fussil y en la má dreta eixecada, la van passechá, sense roba, per tot lo poble. Cuan va torná al ajuntamén, la van posá a una habitassió y per allí van aná pasan desde lo corneta hasta lo capitá, lo quí va voldre, que van se mols, va repetí. Cuan habíen passat tots, la van dixá al carré (calle). Per les seues (segües) garres baixaben regués de sang. Ya no va torná a se dona.

Cuan se van cansá, van agarrá la llista y van aná, carré per carré, casa per casa, fen presos als que estaben apuntats, Los van dú al ajuntamén, van fe una criba (cribá, selecsió) y se van quedá en los que ells van creure mes significáns, als atres los van dixá marchá, entre estos estae X, del que parlarem mes tart.

Als que se van quedá los van fe sentá antiarra, los van lligá les mans en soguetes y no’ls dixaben maure pa res. Tot aixó tos fa enrecordá algo?. Efectivamén diferens gossos, en los mateixos collás.

Aquella nit, los van traure, los van fica en fila a la plassa y rodechats de soldats los van portá a les portes del fossá, allí los van ficá a la paret. Y un capellá que acompañabe als soldats va passá, daban de la fila del prisiones, fen la señal de la creu y dién: Ego te absolvo a peccatis tuis…….


Cuan va acabá, la escuadra que estae formada enfront, a una señal del capitá, va escomensá a dispará …… in nomine Patris, et Filii, et Spiritus Sancti.

Y los fussils se van quedá muts (mudos).   … Amen …
Desde aquí podem veure al capitá, en la pistola a la má, que s’arrime a cada un dels aldeáns morts, s’acache sobre los seus caps y sonae un disparo. Aixó ya u am llechit abáns, verdat. Tots son iguals.
Lo que passe es que a uns los agradaben les cunetes y als atres, com son mes ofissials, los agraen los fossás. Ademes éstos tenen capellá, aunque ningú sápie pa qué val.

Los van dixá com estaben, van torná al poble y se van chitá a dormí.
A la matinada siguién, les famílies, que habíen sentit tamé los focs artifissials, Van acudí al fossá, van plorá unes hores, y van enterrá als seus paréns.
A L’Aldea, no podíe dixa de morí chen.



Memoria 9.

- Agüelo, aixó son massa desgrássies en tan poc temps.
+ Eres un saboc (soso, pero un poquet mes), fa unes charrades me demanabes que te contara coses y ara ya te canses, pues imagínat (imachínat) a la chen de l’Aldea aguantán aixó durán tres añs. Y dixa de potechá (patejá), que pareixes la burreta a la noria, sempre pisotechán la mateixa redolada, sempre donan voltes.

- Es que les seues historietes me pareixen tan irreals que ting que pegam pessics (pellizcos) a la galta (mejilla, cara) pa donam conta que estic despert (despiart), que no estic ensomián.


+ Chic (chec, chaic), no me digues que no te u vach advertí y mes de un camí, pos encara mos queden la charrada de avui, la del soldat romá y la dels sigróns, si’ls agüelos de l’ atre costat no m’en manen alguna mes.
- Venga, fiquemos a la faena, que’l camí se fa caminán.

+ Lo tío X, home de la tía B, aunque s’el van emportá en lo primé viache al ajuntamén, després lo van dixá torná a casa. Al matí siguién, cuan se va enterá de lo que’ls habíen fet als seus compañs, se va despedí de la família y dels veíns, diénlos que s’en anabe a Barselona. Desde aquell día no s’el va torná a veure. Ell sabrá perqué.

Un añ després se va acabá la guiarra.


Als pocs mesos al cuartel de la Guardia Civil, se va presentá este home (lo tío X). Lo comandán del puesto, estabe sentat a una cadira, daban de una tauleta, minchán olives de un plat que teníe allí damún.

*Bon día. (Lo guardia ere andalús y parlabe un Castellá-andalús, pero yo tos u poso en chapurriau, pa que u entengau milló). Agon va vusté?
^ Ving a entregam. No puc aguantá mes amagat.
* A ver, díguem lo seu nom y perqué se vol entregá.
 ^ Miro Siñó, me diuen tío X y a la guiarra yo era l’encarregat del minchadó comunal dels colorats.
* Mol bé, encantat y qué a fet de ruín?
^ Yo no res, pero…..
* A ver, esperos ahí al carré, sentat al banc que ña pegat a la paret.
A les dos hores, torne lo guardia, minchave una oliva.
* Ya s’en pot aná.
^ Que m’en puc aná???, No me deté? No m’envie a fe trevalls forsats tres añs??
* Está sort o qué? Hay mirat los nostres papés, res: hay cridat a Teruel res; a cap de puesto ña res contra vusté o sigue que ya s’en pot aná tranquil.

Lo guardia lo va veure marchá, mentres escupíe (escupiñae) l’os de la oliva y pensabe están bochos estos chapurriaus.

Un atra persona s’haguere posat a saltá de alegría, lo tío X, anabe en lo cap baix, pensán en lo tonto que habíe segut, están amagat tan tems.
Fen memoria, s’en recordae del día que’ls va di als veíns que s’en anabe a Barselona. Cuan se va fe de nit, va torná a casa, la tía B, l’esperabe en la porta entorná. Va entrá dins amagatóns (a escondidas), sense que ningú lo vere. Y desde entonses no había eixit de casa, cuan veníe algú se ficabe dintre del almari, detrás del abrigo de pell de ovella que teníe. No u habíen dit a ningú, ni siquiera a la família. Pero com estabe amagat de tots menos de la seua dona, al acabá la guiarra u van selebrá y als pocs mesos a ella li va escomensá a creixe la tripeta. Y va arribá un momén en que se li anabe notán, entonses, abáns de que la chen de L’Aldea escomensare a parlá, va dessidí presentás.
Pensán, pensán en la segua dona…   se li anabe posan cara de perillán (picaruelo), discurrín per qué la guiarra no había acabat abáns.


Memoria 10.

- Després de tantes charrades que casi me faen plorá (llorar), no sé si de sentimén o de rabia, air me vach enriure un poc, me imaginaba al tío X en los pantalons abaix y a la tía B en les faldetes remangades, detrás del abrigo d’ovella. Los dos sofocats, a tota pressa, no fore que se presentare la tía C, en l’alcahueta que ere.
+ Luiset no te pasos. Eres un poc caborsut (cabezota), ya saps que paso lo que paso, la vida seguís y sempre després del hivern chelat, ve la primavera florida y aixina un añ tras atre.
- Pues si siñó, aunque mes que caborsut, soc tossut, que p’an aixó soc d’Aragó y en molta honra. Y tamé me sé la seua cantinela que després de un segón, ve un minut, una hora, un día, una semana, un mes, un añ…..Y no ten dones cuenta y ya eres vell. Y lo pichó es que sempre te raó.
+ No te olvidos mai, lo Sebeta sempre te raó, o casi sempre.  Ara yo me pregunto, cóm tenim tanta chen que mos llechís en lo pesats que som.
+ Al negosi……

Al entrá los blaus, la família del home del trull, lo van traure inmediatamén y lo van du al dotó. Veure passá an aquell home, ere veure passá a la mort, blanquinós, arguellat, tot acachat, com si tinguere joroba. Los chiquets s’amagaben al veurel, no sabem si per respiate o per pó, creíen que ere un fantasma, un  mort que habíe ressusitat.

Van tindre sort lo dotó del poble estabe reunit en lo dotó dels blaus que estabe mes acostumbrat a veure ferides de guiarra. La del muscle, estabe curada, encara que en la pell sabíe quedat una tocadura que ya no s’en aniríe mai.
La ferideta del cap, teníe una crosta que li anabe caen y li tornabe a eixí, perque de cuan en cuan li supurabe atre camí. Los va contá la seua historia, lo militá li va dí que lo mes segú ere que la bala fore vella, tinguere la pólvora remullada o ñaguere poca y que sol va tindre forsa pa penetrá la pell y al passá l’os se va queda chitadeta, damún del servell y que ara, després del tems que habíe passat, teníe mol perill intentá tráurela, perque ñabíe que partí l’os o serral y podíen tocá lo servell y no li garantisaben que eixire be, ni siquiera si ixiríe viu. Lo milló ere dixala agon estabe, y aisí u van fé.
En vista de alló, se van entorná a casa.
Aquell home va está mol tems en que li molestabe la llum, estae temerós de la chen, cada camí que fae ven (aire), li fae mal lo cap, y cuan s’arrimabe troná li dolíen les garres.
Hasta que va arribá la segua hora, tota la vida va viure en la bala al cap.
Ña camíns que los morts seguísen vivín……

Dos soldats blaus se van presentá a casa de la tía T dién que s’en teníen que emportá al rubio al ajuntamén.
La tía T se va enfadá mol: ¿Qué voleu ara? ¿Encara li han passat poques coses.? Yo vach en vatres, nol dixo sol. Y llevanse lo devantal, va agarrá la ma del seu fill y va  tirá daban dels soldats. La chen que los veíe passá rossegaben per debaix: Qué poca vergoña, pobre crio, qué mes li poden fe?
Lo rubio li diebe a sa mare: dixom sol, que no hay fet res, enseguida tornaré.
Ella diebe: Lo matéis vas dí l’atre camí y mira cóm vas torná. Yo vach, agon vasques tú.
Cuan van arribá a la casa del poble, sol van dixa passá al rubio. La tía T se va tindre que quedá a la plassa, vichilada per dos moros en les seues capes, que la miraben en tot lo despréssio del món.
Al costat del capitá, estae lo capellá que li habíe fet lo funeral. Estae cla que ere ell lo que habíe donat la noticia, al enterás que habíe tornat a casa.
Li van preguntá qué habíe passat. Y ell va contá:
Cuan van passá los sanitaris, replegán als morts pa enterrals, al replegam pa posam al carratell agon posabem los cossos y los trossos que trovaben, al llevam la placa del coll pa dilu a la família y donam com a mort, van veure que del bras trencat encara eixíe sang y que ubría un poc l’ull, per lo que me van portá corrén a la tenda del dotó, allí me van cusí la ferida del bras y me van curá les atres. Vach passá tres o cuatre díes mol malet.
De allí me van portá a un hospital de grans ferides que ñabíe a Benicasim (Castelló) y cuan me vach repondre un poc y podre caminá, me van envía paca casa.
Com no podíen feu de un atra manera, lo van dixa marchá sense mes, encara que’l capellá lo mirabe en mals ulls.
Ñabíe camíns que al rubio li picabe la má isquiarra y cuan s’anabe a rascá, sol trovabe l’aire. Y un poc mes atrás lo seu muñonet.
Los chinolls, cuan plovíe, li faen mal y ademés li u avisaben un día abáns. Al final de la segua vida, ya casi no podíe caminá.
Ña camíns que los morts seguísen vivín...


Memoria 11.

- Agüelo, me parle de tota la chen de L’Aldea, pero ya no ha tornat a nomená a Manuel.
+ Perdona, m’hay enganchat en lo manillá de la porta y ma fet un esgarro (roto) a la camisa y un esgarrap (arañazo) a la má, Qué me diebes?
- Ya, li dic yo que está sort com una tápia, li preguntaba per lo soldat romá, per Manuel.
+ Ah! Ere aixó, bueno pos….
Manuel, ere cusí de la meua mare, habíen nascut lo mateix añ y lo mateix mes, se portaen mol be, ella estabe mol orgullosa, cuan a la Semana Santa lo veie desfilá de romá. Ere gran com un mayo. Yo lo coneixía com lo tío Manuel.
Cuan va passá lo que va passá, teníe uns 22 añs y ningú s’esplicabe qué li habíe passat an aquell monaguillo, que sempre estabe ajudán a missa y que ara anabe en una pistola a la correcha.

Després de la nit dels focs artifissials y mes cuan va morí lo retó, Manuel s’en va aná de L’Aldea, les segües aspirassións eren mes grans, mes amples, se va passá casi tota la troná per la sona de Belchite-Teruel, com jefe de un grapat de espíes y guerrillés.

Ningú se esplicabe com un jove tan llarc, podíe reptá com u fae ell, cuan passae per les trincheres enemigues, sense que los soldats blaus se enteraren.
Les segües aventures,  barrabassades pa uns, heroisidats per als atres, van sé numeroses y mol sonaes.
Cuan lo assunto se anae posán negre, van reculá, hasta arribá a la frontera. Y cuan ya no va quedá mes remei, va passá a Fransa.
Allí , com a mols españols, lo van tancá a un camp de prisioners, als que los faltae casi tot, menos pulses, polls de les persones (piojos), po de que los tornaren a España, etc.
Cuan los van soltá se van esparramá per lo seu país nau. Va fe de tots los ofissis, acabán de paleta, pero, a diferénsia de uns atres, sol cobrabe lo preu (priau) que costabe fe la obra, per aixó, cuan va arribá a vell, no teníe ni casa ni dinés y ne va tindre que llogá una.
Dabán del edifissi, de dos plantes, teníe un trosset de terra (tiarra), agon plantabe hortalises, sempre les mateises, aquelles que, cuan ere crío, se criaben a L’Aldea.
Están a Fransa va coneixe a una chica, mes exaltada que ell, en les mateixes idees, de Madrit, se van casá, van tindre dos fills. Un va elechí la carrera del ejérsit de Fransa, ara té un cárrec importán, pero Manuel no lo u va perdoná mai, ni a la hora de la mort. Les seues idees estaben per damún de tot y de tots.
Cuan se van creá los maquis, ell no va voldre vindre. Com bon espía, sabíe que ere una causa perduda, abáns o després.

Parlan dels maquis, alguns dels que van passá van arribá hasta L’Aldea. A camíns se arrimaben a la chen y los demanaen minchá e informassió, uns atres se vestíen de blaus y anaben per les masaes com si foren buscán maquis y si algú los diebe alguna notíssia, entonses lo acotolaen.

Un día se van posá a un pon (puente) que passe a la vora de L’Aldea y van pará al coche de línea, van fe baixá a la chen en les mans altes, li van prende foc y van matá al guardia sivil que anae de escolta.

Als pobles de la redolada, tamé van fe travesures, algunes mes gordes inclús.
Vull añadí, per si algú, no u sap milló que yo, que lo nom de maquis, ve d’una herba alta pareguda al fenás, que se críe an alguns montes de Fransa, perque ere entre esta herba agon ells s’amagaben y s’entrenaben, abáns de passá a España.

Tornem a Manuel.
Tots los añs felisitae a sa cusina escribinli una carta, ella li contestabe en una atra lo día del seu cumpleañs.
Tan mos va parlá ma mare del tío Manuel que un día mos vam dessidí, vam pillá lo coche y mon vam aná a conéixel.
Mos va ressibí al carré, alt hasta lo sial fransés, se pareixíe a De Gaulle, hasta en lo nas gran.
Cuan, al baixá del coche, mos vam trobá, fron a fron, li vach doná dos abrassos, lo primé de sa cusina, lo segón, meu, de admirassió sense haberlo conegut hasta eixe día, Ma mare no s’engañabe en les persones.

Los dos díes que van está juns, no va dixá de parlá, va contestá a totes les preguntes que li van fe. S’enrecordabe de molta chen del poble, mos va preguntá pels seus amics, volíe que, cuan tornarem a L’Aldea, li enviarem llaós de totes les plantes que criabe al seu hortet. Després de tans añs, mos diebe que cap de les hortalises de allí teníe lo gust de les de L’Aldea.
Vam chugá al guiñot contra ells dos, ere la segua distracsió cuan estaben sols los dos, ella mos fae garrames al arrastre, pero vam fe com si no u verem. Natres vam disfrutá perdén, ells mes guañán.

Li vam preguntá per qué un monaguillo habíe cremat les estátues dels sans, mos va dí que allí va comprobá que sol eren de fusta vella y d’escayola.
Que no ñabíe dret a que l’ amo estare al café o per ahí, mentres lo llauradó se dixae los riñóns al bancal, per uns poquets de siántims.
En un momén me va agarrá apart, los dos sols y me va di dos coses:

1 -Aunque sabíe que a L’Aldea dieben que ere ell qui habíe fet la llista del blaus, als que después van fussilá, NO ere verdat, que ell sí sabíe quí habíe segut, pero que eixe nom s’en aniríe en ell al fossá, perque la troná se habíe passat ya y ell no nessesitae cap de paraigües, pa no remullás. Pero que me u diebe, perque li importabe mol lo que pensara d’ell.

2 -Me va di agón habíe amagat la pistola de la correcha, que la buscara y me desfara d’ella, pa que ningú prenguere mal. Estabe a una casa, davall de unes telles, cuan vach aná a buscala, aquell tellat fae añs que ‘l habíen fet nau.
A la hora de marchá li vam preguntá si volíe algo pa L’Aldea, mos va di que veurela un radé camí, abáns de passá al atre costat.
Li vam di que per qué no veníe, mos va di que la segua doná patíe del cor y que los dotós li habíen dit que no le conveníe lo viache y ell, mentres ella visquere, mai se separaríe d’ella.. Després, cuan ella va morí, va se an ell, al que li van di que ara ere a ell al que no li conveníe.
La seua casa ere un museo de España, les parets plenes de postals, mapes, llibres y demés. Teníe una Antena parabólica, pa veure tots los domenches lo Cine de Barrio y seguí les notíssies de España.
Després de tan tems, tot lo que van parlá u van fe en CHAPURRIAU, la dona sol parlae alguna paraula, pero u enteníe tot, ell lo u habíe enseñat.

Y com l’agüelo Sebeta, sempre que pensabe, pensabe en lo seu parlá, ni lo Castellá, que’l  parlabe, ni lo fransés, que ere lo seu idioma,  lu habíen fet olvidá.
Cuan mon van aná, yo pensó que per está un poquet mes en chen de L’Aldea, mos va acompañá mol rato en lo seu coche. Ell daván, natres seguinlo, en lo nostre.
Cuan va arribá lo momén, mos va fe señal de que li adelantarem y que siguerem sense pará, ere una recta mol llarga. Ell si que va baixa y desde llun, per lo retrovisó se veíe un home, gran com un albre, mol pito, com diebe sa cusina.
Al mirá cap a tras, lo radé que vach veure va se cóm relluíe la punta de la llansa de un bon soldat romá, o ere la llágrima de un Aldeá, de un home gran, milló dit de un GRAN home.



Memoria 12.

+ Chiquet, tot s’acabe , lo bo y lo ruín, ham arribat al final. Ya podem descansá tots.

- S’ha donat conta que es lo capítul dotxe, ha quedat mal sol per un mes.

+ No, menut, ya sé que les bones series de tele tenen tretxe capítuls, natres no tenim cap aspirassió, sol intentem animá a este grapat de amics. Ademés pronte tindrem que dixá de escriure a esta paret, abáns de que la chen se aburrisque de natres.

- Bueno, pero vusté y yo seguirem juns, fem bona collera pa portá este aladre.
+ Sempre mos emboliquem a parlá, nem a la faena…….
Añ 1972. A una oficina cualsevol de Saragossa.

(Totes estes conversassións se van fe en castellá, pero yo les donaré traduídes al parlá prinsipal de esta paret, lo CHAPURRIAU.
Tamé ting que aclarí que a L’Aldea, lo apellit Arrufat ere abundán, ñabíe tres rames de famílies y no teníen res que veure una en l’atra.)

^ Arrufat, avui vindrá un del jefes de la empresa, de Madrit, tindrás que acompañal a fe unes gestións.

+ Mol be, jefe, vusté mane.

^ Arribe a les diau, esperal a la porta del edifisi, Li diuen Diego de apellit. Es de Santander.

10 hores.
+ Siñó Diego, soc Arrufat, me han encarregat que li acompaña a fe lo seu trevall.
- Grássies, pero si ham d’está tot lo día juns, tratam de tú.
- M’has dit que te diuen Arrufat? Eixe apellit no es d’aquí.
+ No, es del baix Aragó. –Li vach contestá yo, mentres escomensabem a caminá-.
- Es que yo conesco eixe apellit, desde fa mols añs. Mentres caminem te u vach a contá.

1939:


Va sé al acabá la guiarra, yo era comandán-jurídic, estaba encarregat dels juissis sumaríssims de aquella sona.

Un día me van porta a un home que le dieben R. Arrufat, l’habíen pres perque ere lo presidén comarcal de un partit colorat del terme que me correspondíe chusgá a mí.
Sol entrá ya me va caure be, teníe la pinta de un home honrat, en cultura, me va di que abáns habíe segut lo secretari del notari de un poble que se diebe L’Aldea. Que cuan va escomensá la gran troná, los compañs, lo habíen triat com a presidén local del partit.
Que després, cuan se van reuní a la comarca tots los dels comités locals, va torná a resultá elexit, ara com presidén comarcal y desde entonses ere lo presidén. Que ell habíe pres totes les dessisións del partit durán eixe temps, uns camíns per consell del comité provinsial, o del sentral y uns atres perque ell habíe considerat que ere aixó lo que ñabíe que fe.
Yo li vach di si se donabe conta de lo que m’estabe dién, que tenia la orden de fussilá a tots los presidéns del partit colorat, foren de la sircunscripsió que foren, provinsial, comarcal o local.
Me va contestá que ell cuan va asseptá lo cárrec, ya sabíe les cárregues que portabe a la esquena, que sí que u assumíe, en tota tranquilidat del món.
Li vach di, Bon home no se done conta que yo ting que condenal a mort dos camíns, un com a presidén comarcal y l’altre com a presidén local de L’Aldea.
Me es igual, sol me pot matá un camí.
Me vach queda admirat de trobá una persona com eisa.
Ell se va eixecá.
+ Agón va?
* No vach a cap puesto, es que li vull demaná un favó mol gran y pa fe mes forsa en la megua súplica, me poso dret y si no me u consedís aixina, me posare achiñollat.
+Qué vol??? Diu la tradissió que els condenats a mort poden demaná un radé favó.
*Pos dixom que lu esplico, y vusté se u penso abáns de contestam. Yo soc lo presidén comarcal, ting uns pocs de estudis, sabía a lo que m’esposaba cuan vach asumí esta responsabilidat. En mí están detinguts los presidéns dels atres catorse pobles o comités locals, son chen sensilla, humilde, la majoría sense instrucsió, han fet, be o mal, PERO sol lo que yo los dieba, no tenen cap de responsabilidat, yo li firmo que soc lo únic responsable de lo qu’ells hasquen fet, yo ting que morí, puc dí que casi estic mort ya, que mes me done morí per dos que per setxe causes. Y vusté pot di que ha fussilat al cap de tots los comités.
Ells tenen família.

+ Y vusté, non té?
* Sí pero ells ya sabíen qué passaríe si perdíem y ham perdut.
+ Me u firmará vusté.
* Ara mateix.
Vach toca lo timbre y va acudí lo teniente, achudán.
Mon comandán??
+ Preparo quinse confessóns a nom d’este home, com que se fa responsable de tot lo que lo partit colorat ha fet als quince pobles y a la comarca, en tot este tems.
Mane alguna cosa mes mon comandán?
+ Si, inmediatamén poson lliures als catorse presidéns locals del partit colorat de esta comarca.
Pero mon Comandán, encara no ha firmat les declarasións.
+ Es una orden, y li hay dit que la cumplisque inmediatamén.
Si, mon comandán.-Va di l’achudán al temps que eixíe del despacho.-
* Grássies, per fiás de la meua paraula. Si haguere ñagut mols homens com vusté, assó no haguere arribat tan llun.
+ Y si haguere ñagut mols com vusté, assó no haguere escomensat.
Va entrá l’ajudán en un mun de papes pa R. y un sol p’al comandán.
R. los va aná firman de un en un, sense llechils siquiera.
+ Tan se fie de mí??  Va di lo comandán, al mateix tems que firmabe lo que l’habíen donat a ell.
* Igual que vusté ha confiat en mí. Pero me estrañe que yo tinga que firmá tot este mun de papes y vusté sol un.
+ Es que, com vusté ha dit abáns, sol lo podem matá un camí.
+ Ara tornos a sentá, dintre de tres hores se cumplirá la senténsia.
+ Anaem a diná, me fa lo favó de diná en mí?? Vol alguna cosa en espesial?
* Cuansevol cosa que umplisque la tripa.
+ Tenién!!!!.
Si, mon comandán.
+ ¿Qué tenim pa diná?
Sigróns, mon comandán.
+ Pues ne porto un topí, dos plats y dos culleres y un poc de pá encara que sigue negre.
Ara mateix, mon comandán.
Al ratet, habíen retirat los papes de damún de la taula y allí estabe un topi hasta lo corombull de sigróns, y un plat en una cullera, dabán de cada home.
Lo comandán va ubrí lo topí y va mirá los sigróns y dirichinse a R, li va di
+ Ham tingut sort, son en carn (volíe di que estaben cucats (agusanados)).
* Milló sabrán, per lo menos tindrán gust.
R. va pilla la cullera de Diego, y del topi va aná traén sigróns hasta que li va umplí lo plat, després, en la segua cullera, se va serví ell.
* Bon profit, bon home.
+ Bon profit, AMIC.
Los dos van minchá, callats, poquet a poquet, cullerada a cullerada, com si foren dos bons amics y tingueren tot lo tems del món.
Cuan van acabá Diego li va pregunta a R.
+ ¿Li apetís algo mes, que natres li pugam doná??
* Miro, si no l’importe, me posaré un atre plat de sigróns, que aquí ne ting segurs y al atre costat, no se lo que ñaurá.
+ Posos los que vullgue.
R. s’en va posa un atre plat y s’el va minchá com si fore lo radé de la seua vida.
Cuan van acabá de diná, se van fumá un sigarro cada u, parlán de política, del tems y de atres coses.
Cuan ya se arrimabe la hora, Diego li va di a R.
+ Lo vech mol tranquil, pa lo que li espere, yo estaría nerviós. No ña res que li dono pena dixá an este món?
* Vach vindre despullat, no me importe anamen igual.
+ Pero vusté es humá?, no li pene res?
* Bueno, com ya tenim confiansa, li diré un secret… sol me pene una cosa, no podre coneixe als meus nets.
A Diego se li va posá un nugo a la gola, aquell home no ere d’este món. Y u diebe tan tranquil.
En aquell momén, lo achudán acompañat de cuatre soldats va crida a la porta.
Es la hora, mon comandán. La guardia está formada. Ham d’aná.
Los dos se posen drets y van cap la porta. Diego en lo cap acachat, R, recte com una vela (viala).
Van caminan, arriben daban del fossá, la guardia está formá, en dos files, en lo seu capitá al mando.
La comitiva porte a R, hasta la mateisa paret del fossá, allí li espere lo capellá, R. no le fa ni cas. Diego s’ha quedat a la vora del capitá que s’ha cuadrat al veurel arribá.
Lo Tenién porte una venda negra a la má, li vol tapá los ulls, ell no li dixe y li diu:
* Dixam que m’en vasca mirán al milló amic que hay tingut en mols añs.
Diego assentís en lo cap, com donanli la raó al condenat.
Lo Tenién se fique al costat del comandán y se pose a llegí un papé en veu alta, ningú l’escolte. Cuan acabe, salude militarmén al comandán.
-No ña dret, a un costat un mun de chen, los blaus; al atre R, ell sol.
Pero R,  encara que los seus ulls miren a Diego, no está allí, lo seu pensamén está a L’Aldea, se despedís de la seua dona, del fills, dels veíns, dels amics del partit colorat, dels carrés, dels campos, de les pedres,……
Lo capitá mire al comandán, este baixe lo cap en sentit afirmatiu.
Preparados…..
Los soldats se preparen, los de la primera fila posen lo chinoll dret antiarra, los de la segunda, lo peu (piau) dret un pas atrás).
… se imagine que ésta al café de la plassa, sentat a una cadira de fusta, daban de una taula de mármol redona, los seus amics, sentats al seus costats, damún de la taula ña unes tases de vermut y dos platets, un en olives rellenes y lo atre en berberechos.
A uns metros, per en tiarra, ña uns críos chugán al tello, als cartonets. Un chiquet de cuatre o sinc añs, arguellat pero espigat,  los mire embelesat, se pareix mol al seu fill, lo Pedro.  Lo menudet se chire, mire los plats en los aperitivos, després mire a R. y ve corrén cap an ell,  li done un bes a la galta y li diu….hola, yayo………

Apunten….
……

R, agarre un palillo, li fique una oliva rellena, després un berberecho y p’acabá un atra oliva, y l’u done al chiquet. Ell li diu…. grássies…. Y chupán la oliva de mes amún, torne al corro dels críos. Qué majo, lo perillá, eixirá a dabán…. Y la seua cara  se ilumine en una sonrisa……
Los soldats se posen los fussils a la cara, lo capitá eixeque la espasa.

Cosa estraña, lo comandán, se pose firmes, eixeque la má hasta la gorra, en un saludo militar, mirán al condenat. Lo condenat li mire an ell, pareix que s’enriu..
Lo capitá, baixe la espasa, al tems que cride
Fuego!!!!
La descárrega es tancada, com si sol haguere disparat un home.
Lo condenat per un momén pareix que no vol caure, en una mirada, que ya no hi veu, al seu amic, después cau antiarra, sense soroll (ruido), com un sac.
Según está manat,  lo capitá envaine l’espasa, trau la pistola de la funda y se arrime al fussilat. Lo comandán, com un autómata, li seguís.
Al arribá lo capitá, apunte al cap, lo comandán está a la vora mirán al mort, mire al capitá un segundo, este se deté. Diego s’acache y li tanque los ulls a R. Després se eixeque y lo capitá dispare. A consecuénsia del sostovó (espentó, movimén), uns sigróns s’escapen pels forats que les bales habíen fet al estómec de R.

Cuan acabe de contau, Diego se pare y mire a Arrufat, este té una llágrima caenli per la cara.
+ Qué te pase?, coneixíes a R.?
- No, ni ell tampoc me coneixíe a mí. Ere m’agüelo, yo soc un dels seus nets.
- Sabíem que habíe mort, fussilat, pero no coneixíem la historia. 
Grássies Diego.
Desde aquell día de 1939, Diego no ha tornat a probá los sigróns.

- Agüelo, assó ha segut mol fort, teníe vusté raó.
+ Yo sempre ting raó.

L’agüelo Sebeta y Luiset, s’eixequen del banc, agon han estat sentats les raderes hores y chino chano, sen van caminan, puchan la costa, hasta la marededeu.

Per lo balcó de la tía R, se escolte una cansó del Dúo Dinámico…
Resistiré…… aunque los vientos soplen fuertes, soy como el JUNCO que se dobla, pero siempre sigue en pie. Resistiré… Cuando se rebelen los recuerdos



Luiset va miran antiarra tot apenat, l’agüelo Sebeta en lo cap eixecat mire al sial, per allí va corrén la canela, lo rubio va detrás…..
Lo Rubio?.....  TE LES DOS MANS.


FIN.

NOTA DEL AUTÓ:

Vull aclarí, un camí mes, que lo que hay contat, en estes dotxe charrades es invensió meua, encara que alguna volta, me hasca apoyat en algún record.


Desgrassiadamén estes coses, o algunes paregudes, van passá o van podé passá an algún poble. Que ningú pensó que L’Aldea es un poble que existís. Pues NO, es pura invensió del autó. 

La única verdat es que allí se parle CHAPURRIAU.

Lo que se ha intentat escribín assó, es que, en un momén donat, unes persones, es igual de quin coló, pensán que faen lo que teníen que fé, van fé lo que van fé.

Y p’acabá que ni uns eren tan ruíns, ni los atres tan bons. O al ravés, que me es igual. Que tot aissó mos servisque, com a llissó, pa que no passo mai mes.